Este es el gran llamamiento de lucha que están difundiendo los sindicatos en todo el país para el 28 de febrero, el día cuando se paralizará todo el sector público y privado, 4a los dos años desde que tuvo lugar el crimen en Tempe.
Junto a los trabajadores en fábricas, en obras de construcción, tiendas, restaurantes, servicios, etc., que harán huelga, también participarán en la huelga los autónomos, los pequeños comerciantes, los artesanos, etc.
Los estudiantes universitarios saldrán a las calles junto con todo el pueblo; los jubilados se manifestarán junto con sus hijos y nietos, en una gran movilización de todos los que experimentan los resultados de una política que conduce a sucesos trágicos como el de Tempe.
Bajo la consigna “sus ganancias ο nuestras vidas” los sindicatos que organizan la gran lucha desde el primer día del crimen, para que sean revelados los verdaderos culpables, salen adelante: apuntan contra la política de los gobiernos y de la UE, la acción de los grandes grupos empresariales, la caza del beneficio, que deja al pueblo expuesto ante todo tipo de peligros. Es decir, la política que para asegurar la rentabilidad trata la vida del pueblo como un “coste” y cada derecho como un “obstáculo”: desde las medidas de protección de la vida humana en los centros de trabajo y los barrios, los medios de transporte, las escuelas y las universidades, hasta la sanidad y la educación públicas y gratuitas, los derechos laborales, etc.
A pocos días hasta la gran batalla de la huelga, Centros Laborales y Federaciones, cientos de sindicatos y organizaciones de masas llaman a los trabajadores en todo el país, luchan para que la ira se convierta en una lucha contra las verdaderas causas de los grandes problemas populares, para que los trabajadores y los jóvenes inunden las calles el 28 de febrero.
