La participación de los trabajadores y de los jóvenes en la huelga general nacional del 28 de febrero, dos años después del crimen ferroviario cuando dos trenes, uno de mercancías y otro de pasajeros chocaron en la zona de Tempe, cerca de la ciudad de Lárisa, donde perdieron la vida 57 personas, en su mayoría estudiantes.
Cientos de miles de trabajadores en 120 concentraciones de huelga que tuvieron lugar en todo el país, con la principal concentración en Atenas, frente al parlamento griego, condenaron las causas del crimen: los beneficios capitalistas, la política de la UE de liberalizar el mercado ferroviario que ha tenido resultados desastrosos y dramáticos para las capas obreras y populares.
Exigieron que se atribuyan todas las responsabilidades políticas y penales del crimen de Tempe, condenaron la política que sacrifica hasta incluso la vida humana por el beneficio.
Como se demostró, los sindicalistas del Frente Militante de Todos los Trabajadores (PAME) y en general de los sindicatos en el ferrocarril habían hecho decenas de denuncias advirtiendo del peligro de un grave accidente. Todos lo sabían: los gobiernos, la UE, las empresas. Todos los gobiernos son cómplices, tanto el gobierno actual de la ND de derechas, como los gobiernos anteriores –el gobierno de izquierdas, de SYRIZA, y anteriormente el gobierno del PASOK socialdemócrata- que dejaron el ferrocarril sin los sistemas de seguridad necesarios, procediendo a su partición, a la liberalización y privatización del ferrocarril, a la falta de personal, al recorte de miles de puestos de trabajo. Igual de culpable es la Unión Europea con sus directrices e instrucciones de “liberalización” de los transportes.
Como destaca el PAME, hoy faltan al menos 2.000 trabajadores para que el ferrocarril opere con seguridad, y añade que “las verdaderas causas que llevaron al choque de los trenes son los “rieles” del lucro que están aplastando nuestras vidas por los intereses de los explotadores del pueblo. Estos rieles deben ser derribados.”
Al mismo tiempo, con su participación en la huelga, los sindicatos de clase destacaron que debido a esta política los últimos dos años casi 300 trabajadores perdieron la vida en los centros de trabajo, porque las medidas de protección para la patronal y el gobierno son un coste.
Es la misma razón por la que el pueblo está desprotegido frente a las catástrofes naturales, los incendios y las inundaciones, porque el gobierno, las autoridades regionales y municipales niegan a financiar los proyectos necesarios y dotar de personal para los servicios necesarios porque se consideran un coste.
La misma razón hace que las estructuras de la sanidad pública funcionen a nivel marginal gracias a la abnegación de los médicos y en general de los trabajadores en estas mientras cada día somos testigos de caídas de techos en escuelas porque estos gastos se consideran un coste.
Todo ello viene a sumarse a la mala situación que experimenta el pueblo con la carestía, la pobreza, los salarios bajos, las subastas de casas, mientras el gobierno gasta miles de millones de euros en armamento para la OTAN para que nuestro país apoye las guerras imperialistas.
La consigna “SUS GANANCIAS O NUESTRAS VIDAS” que prevaleció en esta gran lucha huelguística indica el camino para que se fortalezca la lucha por la protección de la vida humana, por los convenios colectivos de trabajo, por aumentos salariales, por el aumento de la financiación estatal a la Sanidad, la Educación, el Bienestar, contra los armamentos militares y los gastos para la OTAN, para que Grecia se desvincule de los mataderos de las guerras imperialistas.









