Los bloqueos del campesinado pobre se están multiplicando por toda Grecia. Los agricultores de Tesalia marcan la pauta con tres bloqueos masivos en la carretera de Larissa, Karditsa y Tríkala con la participación de miles de tractores. La movilización campesina se extiende por todo el país y llega hasta las aduanas con los países vecinos, Bulgaria y Turquía. El gobierno no ha podido impedir en su comienzo las movilizaciones del campesinado pobre mediante la represión, y ahora recurre al llamado “automatismo social” es decir busca poner a otras capas obrero-populares contra los campesinos que luchan.
En su comunicado, el KKE después de saludar a las luchas del campesinado y condenar el intento de represión de sus luchas, destaca por qué el interés de los trabajadores está con los campesinos que luchan. Su comunicado es el siguiente:
“El KKE saluda la movilización masiva de los campesinos pobres de Tesalia y de otras regiones del país, que demuestra que “la gota ha colmado el vaso” debido a la política que los está arruinando, del coste insoportable de la producción, la falta de protección de las catástrofes naturales y las enfermedades de los animales, de su intento de cargarles con las consecuencias de los escándalos que alimenta la PAC de la Unión Europea y en los que están implicados los gobiernos y su personal.
Las movilizaciones actuales son también una respuesta a las promesas del gobierno, supuestamente de “apoyar los ingresos agrícolas” que no convencen a nadie. El gobierno ha recurrido a la represión con gases lacrimógenos, fuerzas antidisturbios y detenciones para confrontar a estos campesinos a los que debe dinero. Pero ha fracasado ante la masividad, la determinación y la desobediencia organizada de los campesinos pobres.
Su lucha es justa, concierne a todo el pueblo que paga muy cara por los alimentos, dado que entre la producción del campesino pobre y los hogares populares se interpone todo un mecanismo de grandes comerciantes, industriales, el propio Estado con los impuestos que impone y obliga a los campesinos a vender barato mientras que las familias populares compran carísimo. Por eso su lucha debe ser apoyada por el movimiento obrero-popular contra los intentos de dividirlos, “el automatismo social”, contra la represión del gobierno y de sus mecanismos.
Exigimos la puesta en libertad de todos los detenidos y la retirada de las fuerzas policiales.”
