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TERCERO TEXTO DE LAS TESIS DEL CC DEL KKE PARA EL 21o CONGRESO DEL KKE:“LA ESTRUCTURA DE LAS CLASES SOCIALES EN LA SOCIEDAD GRIEGA, LA SITUACIÓN DE LA CLASE OBRERA ACTUALMENTE, EL CURSO DEL MOVIMIENTO OBRERO SINDICAL, LA PROMOCIÓN DE LA ALIANZA SOCIAL Y LA INTERVENCIÓN DEL KKE”

Date:
may 24, 2021
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INTRODUCCIÓN

1. El XX Congreso del KKE llegó a conclusiones fundamentales de la lucha por el reagrupamiento del movimiento obrero-sindical y la construcción del Partido en la clase obrera. Al mismo tiempo, determinó direcciones y tareas para los años siguientes, así como la realización de una Conferencia Panhelénica para el control de la Decisión. El CC no pudo realizar la Conferencia Panhelénica sobre el Trabajo en la clase obrera, aunque la acción del Partido desde el XX Congreso ha acumulado nuevos datos. Por lo tanto, el trabajo en la clase obrera y su movimiento sigue siendo un tema importante de discusión en el XXI Congreso.

El Programa del KKE señala que la acción del Partido en las condiciones no revolucionarias contribuye decisivamente a la preparación del factor subjetivo - el Partido, la clase obrera, sus aliados - para las condiciones revolucionarias, para la realización de sus tareas estratégicas. Se destaca que la atracción de sectores pioneros de la clase obrera y la movilización de su mayoría con el KKE pasará por varias fases. El movimiento obrero, los movimientos de los autónomos en las ciudades y los campesinos y la forma de expresión de su alianza con objetivos anticapitalistas-antimonopolistas, con la acción pionera de las fuerzas del KKE en condiciones no revolucionarias, son la primera forma para la formación del frente obrero - popular en condiciones revolucionarias.

La Decisión del XX Congreso también planteó varias cuestiones importantes sobre el papel del KKE en el movimiento obrero-popular. En esta dirección, el CC presento este texto para su discusión en todo el Partido y la KNE, en combinación con los otros dos textos que ya han sido publicados.

Venimos hoy a discutir la nueva situación, a identificar aspectos positivos y debilidades subjetivas que requieren un enfrentamiento radical, para adecuar nuestra acción a las demandas que surgen de las necesidades de las fuerzas obreras y nuestros objetivos.

El primer tema que examinamos son las tendencias básicas en la estructura de clases de la sociedad griega, así como la situación actual de la clase obrera, diez años después de la manifestación de la profunda crisis económica capitalista anterior. Las examinamos analizando los términos que se han ido y están formando en su trabajo y vida, en general los términos de venta de su fuerza de trabajo, pero también las formas de intensificación de su explotación. Identificamos los cambios negativos y cómo afectan la unidad y su lucha común, la formación de la conciencia política de clase, su actitud hacia los gobiernos burgueses de gestión de la crisis en detrimento de los intereses de los trabajadores.

El segundo tema clave que planteamos en el debate es la situación en el movimiento obrero-sindical actual, el grado de organización de la clase obrera en los sindicatos y su participación en la lucha de clases. Discutimos las conclusiones de las luchas y los esfuerzos para crear focos de resistencia y reivindicación en los lugares de trabajo. Destacamos el bajo nivel de organización de la clase trabajadora que está en su punto más bajo históricamente. Identificamos las razones objetivas de esta dificultad de afiliarse a los sindicatos, pero también nuestras propias debilidades, especialmente las tareas que surgen para cambiar esta situación, para marcar metas más decisivas a alcanzar, con el fin de lograr si es posible un desarrollo fuerte de la organización y la participación en la organización sindical. Discutimos el curso del PAME como agrupación clasista de Federaciones, Centros Laborales, sindicatos con línea de lucha en la dirección anticapitalista-antimonopolista, una gran conquista, como estimó en el XX Congreso.

El tercer tema es el estudio de la experiencia a partir de la acción conjunta de los sindicatos obreros con las organizaciones de masas de los autónomos de la ciudad y los campesinos, en general, en el esfuerzo por mejorar las condiciones de su alianza social. Ya se han realizado dos Conferencias  Panhelénicas del Partido para nuestro trabajo con los autónomos y los campesinos, que aportan con experiencia y conclusiones nuestra intervención para promover esta tarea de importancia estratégica para el Partido. Es la clase obrera como fuerza dirigente la que creará los términos y condiciones para forjar la alianza social, para atraer las fuerzas sociales aliadas hacia una acción conjunta cada vez más estable, promoviendo el marco de lucha correspondiente.

Tesis 2-18

Las posiciones 2-18 del 3er Texto del Comité Central para el XXI Congreso, incluyen las conclusiones de la investigación realizada por el KKE que examina las tendencias básicas en la estructura de clases de la sociedad griega y la situación actual de la clase obrera, diez años después de la manifestación de la profunda crisis económica capitalista anterior, se incluyen estadísticas relevantes, etc. Quienes estén interesados pueden encontrar las posiciones 2-18 en inglés, en el siguiente enlace:

ORIENTACIÓN EN LA ADQUISICIÓN Y EN LA DISTRIBUCIÓN DE FUERZAS

19.  En base a la clasificación sectorial de la clase obrera y la dinámica de los sectores económicos, así como la relativa importancia de los sectores en la reproducción ampliada del capital social, se puede estimar que los sectores de elevada importancia para el próximo período son los siguientes:

  • La industria manufacturera, con un énfasis especial en los grandes centros de trabajo: en la industria alimentaria, en la industria de energía, en la industria farmacéutica y en el sector metalúrgico. El subsector de construcción de gran escala - obras públicas.
  • El sector crucial para el total de la economía: el sector de los transportes/logística y los transportes en total (marítimo, aéreo, terrestre, etc.). Se destaca la gran importancia del sector de transporte de mercancías (entrega urgente) en las nuevas condiciones.
  • El sector de telecomunicaciones/informática, por su importancia como la columna vertebral del transporte de información, el papel elevado de los técnicos para asegurar el teletrabajo etc. Al mismo tiempo, se espera que el sector de informática aumente, tanto a causa de su desarrollo dentro del país como por el teletrabajo con el exterior.
  • El sector de servicios científicos y técnicos que se espera que aumente en el próximo período, ya que las nuevas condiciones económicas y sociales aumentan las actividades correspondientes.
  • Los sectores de la salud y la educación los cuales, aparte de ser importantes en la reproducción de la fuerza laboral, son grandes sectores de concentración de trabajadores y asalariados.
  • Los sectores de restauración y turismo, con énfasis en los grandes complejos turísticos, en los cuales se espera que sea transferida una parte del empleo proveniente de las pequeñas empresas del centro de las ciudades que se están viendo reducidas.
  • El sector del comercio, que aunque se espera una reducción, mantendrá una parte importante del empleo y del trabajo asalariado.

ALGUNAS OBSERVACIONES FUNDAMENTALES SOBRE EL TRABAJO EN EL MOVIMIENTO OBRERO-SINDICAL

20.  En base a todos los datos anteriormente mencionados, el próximo período es necesario dar particular énfasis en los siguientes factores:

  • La especialización del trabajo en las mujeres asalariadas que están aumentando (en relación con los hombres en sectores de la economía).
  • La intervención política y sindical integrada, sobre los asuntos del horario de trabajo, las relaciones de trabajo flexibles y el teletrabajo.
  • La elaboración adecuada de marcos de lucha en los sectores con salarios por encima del promedio, utilizando la presión ejercida por el capital para reducir el salario medio.
  • La distribución de fuerzas en sectores y subsectores relativamente nuevos que presentan una tendencia dinámica de crecimiento (comercio electrónico, logística, grandes proyectos de construcción, etc.), teniendo en cuenta la reestructuración interna de los sectores y los grupos de empresas provocada por las nuevas inversiones del "desarrollo verde" y la transformación digital (p.ej., sector energético, telecomunicaciones, medios de comunicación).
  • El fortalecimiento de la intervención en los sectores de servicios científicos y técnicos, educación y cultura, teniendo en cuenta los problemas particulares relacionados con el trabajo por recibos por honorarios.
  • La mejora de la planificación de nuestra intervención en la gran categoría de asalariados que trabajan en pequeñas empresas y microempresas.
  • La especialización de nuestro trabajo entre los empleados asalariados inmigrantes.
  • La planificación de la intervención multifacética entre los parados y más particularmente entre los parados de larga duración, cuyo número se aumentará.

Capitulo C

LA SITUACIÓN EN EL MOVIMIENTO OBRERO-SINDICAL

21. El movimiento obrero-sindical durante la década pasada recibió un golpe aún más fuerte. El retroceso se profundizó, no sólo en el contenido de acción e incorporación de la mayoría de los sindicatos en los objetivos estratégicos del capital, sino además en la base e infraestructura organizativa.

El porcentaje de los trabajadores sindicalizados en el sector privado no supera el 15%. Según los datos de GSEE, en cuya fuerza participan 62 Federaciones, 79 Centros Laborales, que tienen inscritos a más de 2.300 sindicatos de primer grado, en las elecciones de los tres últimos años participaron 360.000 trabajadores. La participación ha alcanzado el mínimo histórico. La disminución respecto la organización de los trabajadores es aún mayor, teniendo en cuenta que el porcentaje de los trabajadores que participan activamente en los sindicatos es más bajo que el porcentaje de los trabajadores que participan en las elecciones de los sindicatos, en combinación con la amplia alteración de datos, los sindicatos “fantasma” presentados por el sindicalismo patronal y gubernamental con el objetivo de elegir a mas delegados en los órganos sindicales.

En ADEDY, que tiene inscritas 44 Federaciones, en las cuales participan más de 1.200 sindicatos de primer grado, en sus elecciones participaron 265.000 trabajadores. A pesar de que el nivel de participación en el Sector Publico alcanza el 62%, este porcentaje solo incluye a los trabajadores fijos o con contratos indefinidos, que están afiliados a los sindicatos desde el primer día de trabajo, aún sin saberlo. Al mismo tiempo, la participación está basada en un conjunto de favores personales, contrataciones, traslados, reubicaciones, promociones etc. promovidos por los grupos sindicales de los partidos burgueses. Las organizaciones sindicales de ADEDY no inscriben a trabajadores contratados y en general a los trabajadores con relaciones de trabajo flexibles en el Sector Público, cuyo número está ampliándose, mientras que en algunos sectores (Salud, Administración Local) estos trabajadores son mayoría, a los cuales las cúpulas sindicales no les permiten a afiliarse a los sindicatos. Una excepción son las Federaciones de Educación que han establecido la participación de los profesores interinos etc. en los sindicatos de primer grado y en los congresos de las Federaciones del Sector Público, cuando las fuerzas con orientación de clase tienen la mayoría.

Aunque el 85% de todos los asalariados (del sector privado y público) pertenece al sector privado con relaciones de trabajo a tiempo completo o  parcial, la mayoría de los sindicalizados pertenece al sector público, así como al sector público más ampliado al que abarca GSEE, con un porcentaje del 56% del total de los sindicalizados.

Durante la última década y en la fase de la crisis capitalista, ha aumentado en número y porcentaje, pero el nivel de organización se ha reducido, tanto en el conjunto de la clase obrera así como a nivel regional y según sector de producción.

Factores objetivos y cambios que tuvieron un impacto en el nivel de organización

22. La contrarrevolución, el derrocamiento del socialismo, tuvo objetivamente un impacto en el retroceso del movimiento obrero y sindical. La construcción socialista en el siglo XX, a pesar de los problemas y las desviaciones que existían, tuvo un impacto positivo en el movimiento obrero y sindical de los Estados capitalistas, en la organización y la movilización de los trabajadores.

El curso del retroceso sufrió el impacto contradictorio de la manifestación de la anterior crisis capitalista, con la contracción o cierre de la actividad productiva en sectores con una historia de organización y luchas sindicales, así como el desarrollo de otros sectores durante esta década, y también de nuevos sectores de la economía.

El retroceso está vinculado a muchos cambios negativos en las condiciones de trabajo y de vida de la clase obrera, a las formas y los medios de intensificación de la explotación. Se tratan de cambios moldeados por las llamadas reestructuraciones capitalistas y las reformas anti-obreras mediante los conocidos «memorandos» y otras leyes. Las altas tasas de paro y de trabajo a tiempo parcial, la generalización de las formas de trabajo temporal flexible, la explotación extensa de los inmigrantes, la estratificación importante, la movilidad de los jóvenes trabajadores entre diferentes sectores o incluso dentro el mismo sector, tienen un impacto importante en el nivel de organización y en la unidad de la clase obrera. Estos factores dificultaron aún más el resurgimiento de los sindicatos, en combinación con el contenido de acción profundamente reformista y estrechamente gremial que predominaba en el movimiento obrero y sindical, con el desarrollo de la línea de cooperación social y de incorporación de los sindicatos por el Estado y los mecanismos de la UE, mientras que las direcciones de muchos sindicatos empresariales están alineadas con la patronal.

La clase burguesa, utilizando el arsenal legal que todos los gobiernos sucesivos le han asegurado, así como la amenaza del despido en condiciones de explosión del paro, ha generalizado los contratos individuales. Se dio la posibilidad a la patronal de eliminar en la práctica los Convenios Colectivos de Trabajo, de reemplazarlos por contratos firmados por asociaciones de personas, que son instrumentos suyos, teniendo consecuencias negativas directas en las condiciones de venta de la fuerza de trabajo y asestando un golpe contra la organización sindical. En este marco, las relaciones de trabajo flexibles se establecieron y se generalizaron, y las evaluaciones de trabajadores en combinación con otros métodos reforzaron la competencia entre los trabajadores.

En el terreno de factores materiales objetivos, la conciencia de los trabajadores se ve influida por las diferentes decisiones gubernamentales de gestión del gobierno, con las cuales intentan controlar las consecuencias del círculo vicioso de concentración y centralización del capital, así como de su devaluación.

El período durante el cual muchos habían puesto sus esperanzas en SYRIZA, el período de las ilusiones por la superación de las consecuencias de la crisis capitalista con un gobierno de gestión de “izquierda” en el marco del poder capitalista, el período de compromiso fomentado y de derrotismo provocado después de la refutación de las esperanzas falsas, han traído un nuevo debilitamiento general de los sindicatos. Anteriormente, en las “plazas de los indignados” se habían difundido consignas reaccionarias, como “fuera los partidos y los sindicatos”, y a continuación se reforzó la lógica de la “ineficacia” de las luchas y que “no cambia nada”, ya que el criterio era su conexión con la alternancia gubernamental con el fin de una intervención en la economía capitalista y en la UE supuestamente favorable al pueblo.

Durante todo este período se vio reforzado el desarrollo de la colaboración de clases por parte de gobiernos de los partidos burgueses liberales, socialdemócratas, así como oportunistas. Se vieron reforzadas las calumnias contra la lucha de clases y el desprecio de la organización sindical. Bajo la responsabilidad de la patronal y sus fuerzas burguesas políticas y sindicalistas, se vieron expandidos los fenómenos de desorganización, fraude y soborno, se formó una línea y practica más agresiva contra las fuerzas con orientación de clase para acerar los intereses patronales y el sistema. En oposición a estas aspiraciones, se sitúa la acción del KKE y los sindicatos con orientación de clase.

El sindicalismo estatal, gubernamental y patronal predominan en las Confederaciones sindicales superiores

23. La acción del Partido, que ha aportado resultados concretos y una experiencia importante, no ha cambiado el hecho de que en los sectores básicos de la economía capitalista, los sindicatos y una serie de organizaciones de segundo grado permanecen vinculados con la sección que colabora con el gobierno y predomina en GSEE y ADEDY, el cual es un mecanismo de administración conjunta, de gestión de las aspiraciones y los intereses patronales y estatales, y un mecanismo claramente burocrático. A lo largo de los años, se ha profundizado su papel como una herramienta de la patronal y del Estado contra la clase obrera y sus derechos.

La mayoría en los órganos sindicales superiores de GSEE y ADEDY, sigue, a pesar de la reducción de su prestigio, en las manos de las facciones sindicales de los partidos burgueses, PASKE (facción del partido socialdemócrata PASOK) y DAKE (facción del partido de derecha ND), los cuales se colaboran firmemente entre ellos y con las fuerzas de SYRIZA alineadas con ellos. SYRIZA no ha logrado crear un brazo sindical importante ni durante su mandato gubernamental, ni durante la fase anterior cuando esencialmente absorbió en el Parlamento fuerzas importantes del PASOK.

En la fase actual, la expresión de la socialdemocracia en el movimiento sindical reajusta su actitud y su táctica, con el fin de fortalecer, ampliar y establecer su incorporación al servicio de la competitividad de la economía capitalista. Los últimos años, el gran retroceso del PASOK, hoy día llamado KINAL, debido a su apoyo en todas las reestructuraciones en condiciones de crisis capitalista profunda, tuvo como resultado que sus fuerzas se movieron a SYRIZA, convirtiéndole en el representante principal de la socialdemocracia. Sin embargo, esta sucesión, aunque provocó un desorden en el seno de la entonces dominante facción PASKE, no causó una caída correspondiente.

PASKE, más especialmente en el sector público y el sector público más ampliado, los bancos, y algunos sectores industriales, sigue manteniendo un mecanismo de incorporación. Desde 2010 y en dos congresos consecutivos, hasta 2016, hubo un curso descendiente tanto en GSEE como en ADEDY. Este curso se interceptó en 2020 y sigue siendo la primera fuerza en porcentajes y escaños. Esto muestra una independencia relativa en el funcionamiento de PASKE en relación con su partido, que se basa en su conexión directa con mecanismos, principalmente en las antiguas empresas públicas, y conexión de los sindicatos con estos mecanismos, fuertes lazos de las direcciones de los grandes sindicatos con las administraciones de empresas y el Estado burgués, independientemente de la composición gubernamental que existe en cada momento. Con el Instituto de Trabajo (INE) de GSEE como su vehículo, continuaron a formar mayorías falsificadas y a controlar las direcciones de organizaciones sindicales con los programas de formación, agencias de trabajo y de contratación -básicamente “esclavistas”- que se han convertido en mecanismos de conciliación directa de los Centros Laborales con las empresas. El PASOK estuvo en el gobierno durante muchos años, pero estableció el desarrollo de sus fuerzas sindicales durante un otro periodo histórico. Por el contrario, a SYRIZA no le era posible formar cuadros sindicales similares, y se limitó a funcionar de manera complementaria de PASKE, principalmente para la formación de direcciones y mesas anti-PAME.

En toda esta situación se refleja la volatilidad que aun prevalece en la socialdemocracia. En estas condiciones, los cuadros sindicales socialdemócratas están a la espera de los desarrollos: si KINAL se recupera o si SYRIZA se mantiene como la fuerza dominante de la socialdemocracia, a pesar de los problemas organizativos que tiene por el momento. Al mismo tiempo, una parte de los sindicalistas de PASKE sigue esperando un posible futuro gobierno de coalición con la ND. A través de este proceso, con un frente de confrontación firme, existen capacidades de emancipar a sindicalistas que están preocupados por esta decadencia e intentan separar su posición.

DAKE y otras facciones que representan la ND en todos los niveles del movimiento sindical siguen siendo una gran fuerza. De hecho, en ADEDY marcan un aumento significativo, principalmente en las Federaciones de Educación. Utiliza, como PASKE, el mismo potencial que ofrecen las asociaciones de la patronal, el Estado burgués y las asociaciones empresariales europeas. Utilizando los programas europeos y más especialmente los fondos del INE de GSEE, han formado junto con las fuerzas de PASKE en los trabajadores del sector privado, particularmente en Centros Laborales del norte de Grecia, un mecanismo importante para la incorporación de trabajadores, la creación de sindicatos fantasma y representantes ilegítimos.

Las fuerzas de SYRIZA se han debilitado desde 2016 hasta hoy. Tuvieron una subida en ADEDY durante su gobierno y los años anteriores, ya que en GSEE se expresó principalmente con la colaboración con una parte pequeña que se separó de PASKE (la facción EMEIS). A pesar de su disminución, sigue manteniendo fuerzas en ADEDY. Al mismo tiempo, sigue eligiendo representantes a través de listas electorales unificadas con PASKE y DAKE, junto con el apoyo de la patronal, como por ejemplo en supermercados y empresas marítimas. Sus cuadros participan más activamente en las direcciones del INE de GSEE y en fondos de asociaciones profesionales en sectores como la industria farmacéutica, el comercio, las empresas marítimas, y son parte orgánica del mecanismo de soborno e incorporación de trabajadores.

Las fuerzas de ANTARSYA, principalmente, pero también otras fuerzas como META/LAE, presentan una caída durante los últimos años en primer lugar a causa de su apoyo al gobierno de SYRIZA. En GSEE y en el sector privado en general siguen siendo una fuerza marginal con unas pocas fuerzas en los sindicatos de científicos asalariados y en unos pocos sindicatos de “personas jurídicas de derecho privado”, que pertenecen al sector público más ampliado. En el ámbito del sector estatal, donde tienen una cierta presencia más organizada, siguieron el curso de las fuerzas sindicales de SYRIZA, es decir, marcaron una pequeña aumento durante el período del ascenso parlamentario y gubernamental de SYRIZA y un descenso en los dos últimos congresos de ADEDY. Principalmente mantienen fuerzas en el profesorado, pero también en los hospitales.

Es característica su participación en listas electorales conjuntas con las fuerzas de SYRIZA, más especialmente en los docentes y en otras áreas, ya que en algunos casos presentan marcos de lucha conjuntos y táctica conjunta.

En todo caso, existen nuevas exigencias en el debate en ADEDY. La correlación entre las fuerzas burguesas liberales y las fuerzas reformistas oportunistas en ADEDY no es el mismo con el de GSEE y no podemos considerar que la confrontación en el primero sea una réplica del sector privado. En ADEDY la conexión de los trabajadores y el Estado es orgánica. Al mismo tiempo, el impacto socialdemócrata y oportunista expresado varias veces en las resoluciones de ADEDY exige un plan bien elaborado sobre el contenido, la confrontación y las iniciativas para combatir las ilusiones creadas. Más aún, ya que en el terreno de la agudización de los problemas populares, a causa de la agudización de todas las contradicciones y contrastes del modo de producción capitalista, en el programa de reformas en sus diversas formas, dirigido a los trabajadores del sector público, destaca el apoyo del Estado a la economía, en la lógica del frente “anti-neoliberal”, “contra la derecha” y “contra la represión”, y se especializa en el marco del movimiento para incorporar cualquier forma de radicalismo expresado.

Se refuerza el control estatal asfixiante de los sindicatos

24. El marco del control estatal de los sindicatos se profundiza con una serie de leyes, como durante el período del gobierno de SYRIZA con la ley sobre la proclamación de huelga y a continuación con las leyes de la ND sobre el marco del funcionamiento de los sindicatos y el control de su legalidad. El marco legislativo refuerza constantemente la intervención del Estado burgués. Las organizaciones sindicales no son “de facto” organizaciones en términos de organización y funcionamiento (estatutos) determinados libremente por sus miembros. Se rigen por disposiciones legales con relación a los sindicatos, las cuales son cada vez más estrictas. La Justicia burguesa interviene para resolver la falta de dirección de organizaciones sindicales, escogiendo una dirección provisional. Es una práctica que fue aplicada ampliamente en la historia más reciente del movimiento obrero y sindical y en el último congreso de GSEE, hasta el momento en el que el gobierno intervino con las fuerzas de represión para imponer quiénes y cómo van a votar.

Las disposiciones legales asfixiantes limitan la acción de los sindicatos y la representación de los trabajadores. Por ejemplo, no existen disposiciones para los comités sindicales de un sindicato sectorial, por lo tanto no son regulados según la Ley 1264/82. Lo mismo vale para la elección de representantes de un sindicato sectorial provenientes de los centros de trabajo. Teniendo en cuenta que el requisito previo para la formación de un sindicato son 21 miembros y que en la mayoría de las empresas trabajan hasta 50 trabajadores, se prohíbe que la gran mayoría de los trabajadores en los centros de trabajo tenga representantes legales. Hasta incluso el comité de sanidad y seguridad en el trabajo (Ley 1588/85) necesita 50 trabajadores como límite mínimo para su formación. Este límite conviene al poder burgués, basándose en la realidad de la económica capitalista griega, para excluir también de esta manera, la representación formal de la inmensa mayoría de los asalariados.

En condiciones de desarrollo de la económica capitalista se encontrarán mejor preparados para incorporar los sindicatos más profundamente no solo en línea de consentimiento y colaboración de clases, sino también como parte del mecanismo estatal. Para convertirlos en mecanismos de administración conjunta «justa y democrática» de las demandas empresariales, en mecanismos burocráticos, sin la participación viva y activa de los trabajadores y sin ningún papel decisivo en su movilización. Este acontecimiento existe en los países capitalistas de Europa. Los principales sectores y regiones industriales forman Zonas Económicas Especiales sin presencia de sindicatos.

Actualmente, esta planificación ha cambiado de nivel, ya que se refleja en una serie de leyes. Los sindicatos se convierten en un mecanismo del Ministerio y de la patronal. La ley establece que los sindicatos, incluso cuando logran firmar un convenio colectivo sectorial, deben al mismo tiempo presentar un estudio técnico-económico y actuarial, y se comprometen de que las propuestas no dañen el desarrollo viable de las empresas del sector. De esta manera, los sindicatos se convertirán por ley en defensores de la competitividad. El ataque contra el derecho a la huelga y las nuevas leyes de represión vienen a completar este ataque.

Esta línea se refleja brevemente en la dirección de convertir los sindicatos en “consejos laborales” sin procesos de masas, sin la capacidad de proclamar huelgas, restringiendo la elaboración de objetivos de lucha en los límites de las demandas económicas por la empresa. Es decir, la “europeización” que están intentando lograr desde la década de los noventa. La presencia de la patronal con penetración directa en el movimiento sindical se basa en la planificación anteriormente mencionada. Un elemento que se destaca en los últimos años es la participación mucho más directa y con presencia física de la patronal en los sindicatos de grandes sectores como el comercio y las empresas marítimas.

Al mismo tiempo, con la introducción de reglas y a través de OAED (Organización para el empleo de mano de obra) el Estado controla la situación económica de los sindicatos, de la cual están directamente dependientes. La falta de independencia financiera y de apoyo a los sindicatos a través de las cuotas que pagan los miembros, tienen un impacto decisivo en la existencia de la infraestructura material que es necesaria para apoyar y fortalecer su intervención.

De hecho, siempre y cuando la indignación de los trabajadores se aumente, es posible que sindicatos con mayorías socialdemócratas y oportunistas empiecen alguna lucha limitada dentro de los “límites de resiliencia” de la economía. La clase burguesa experimentada no quiere que sus representantes en los sindicatos pierdan completamente sus lazos con los obreros. Lo importante es la orientación de los sindicatos, consecuentemente es necesario que nuestras fuerzas estén preparadas ante esta posibilidad.

El papel del INE de GSEE

25. La intervención del INE de GSEE es corrosiva. Se trata de un Instituto vinculado a los respectivos institutos de investigación y estudio de las asociaciones de la patronal (Federación de Industrias Griegas, SEV), de Cámaras y de servicios estatales del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Tiene un presupuesto de millones de euros, gestiona una gran suma de programas europeos, más especialmente los programas de capacitación, de formación, de estudios, así como los programas del Marco Estratégico Nacional de Referencia (ESPA). Además, colabora con los institutos respectivos de sindicatos en el ámbito de la Unión Europea, con las instituciones de la socialdemocracia europea e internacional. Su objetivo declarado es consolidar la “cooperación social”, es decir la “colaboración de clases”, por esta razón opera una Academia de Cuadros (escuela de dirigentes sindicales al servicio de los empresarios). Presenta las opciones de la mayoría de GSEE como científicamente fundamentadas, promoviendo estudios e investigaciones relevantes. Junto con las organizaciones de la patronal y los gobiernos participa y planifica la política antiobrera y la promoción de las reestructuraciones, implicando la Federación en su formulación.

En la fase anterior de la crisis y antes del ascenso de SYRIZA en el gobierno, el Levy Economics Institute en cooperación con el INE de GSEE contribuyó -como anunció- “fundamentalmente en la planificación y la aplicación de un programa social para la inmediata creación de empleo en toda Grecia”. En esencia, aplicaron los conocidos programas de empleo a tiempo parcial, financiados por los fondos estructurales de la UE. Al mismo tiempo, el INE de GSEE propagó el cambio de fórmula política, promoviendo recetas neokeynesianas. En 2015 apoyó abiertamente la aceptación del paquete de la UE y el «SÍ» en el referéndum junto con las asociaciones patronales. En 2019 procedió a una propuesta común con el SEV sobre la “reconstrucción productiva”, la “competencia sana” y la “alianza social” de SEV, GSEE y Cámaras.

Con los programas -supuestamente- para abordar el problema del paro, recopiló una enorme lista de parados. Uno de los aspectos de utilización de este método fue la formación de correlaciones en los sindicatos. Durante el curso de cada programa fundó un sindicato de empleados privados, que lo inscribieron solo en el Centro Laboral y no en la Federación y forzaron a todos los trabajadores a votar. De esta manera, existen sindicatos fantasma de trabajadores del sector privado con miles de votantes, p. ej. el sindicato de empleados privados en la ciudad de Farsala que presentó 488 votantes en el último congreso.

Los programas del INE de GSEE son financiados por el ESPA. Su contenido es la formación y la recapacitación de trabajadores y la formación de cuadros sindicales para que sean capaces de gestionar los asuntos de los trabajadores a favor de los grupos empresariales, p. ej. programas de formación sobre “la gestión de conflictos en las empresas” por parte de cuadros sindicales. Su objetivo es convertir las organizaciones sindicales en mecanismos capaces para la gestión de los problemas de los trabajadores a favor de la patronal y del Estado, incluso dificultando la lucha por las demandas más mínimas.

Fragmentación organizativa

26. Bajo la responsabilidad de las fuerzas que predominan en GSEE, continuó la fragmentación organizativa del movimiento obrero y sindical y su  fraccionamiento en organizaciones sindicales de segundo y primer grado. Más especialmente en las condiciones de la última década, se reveló un problema grave, es decir, el hecho de que existen muchas Federaciones en un mismo sector (transportes, energía), así como muchos Centros Laborales en la misma prefectura.

Las facciones sindicales de los partidos burgueses invocan la unidad organizativa solo cuando asegura la incorporación de los trabajadores y del movimiento con orientación de clase, cuando garantiza y promueve la aceptación de la teoría de los intereses comunes entre los explotadores capitalistas y los obreros que sufren la explotación. Cuando se forman las condiciones para lograr elementos de unidad de los trabajadores en base a los intereses de clase, pretenden tomar medidas organizativas con la fundación de nuevas organizaciones de primer y segundo grado. El fenómeno de alta fragmentación es la continuidad de la vieja fragmentación gremial y es la opción de fundar organizaciones para la formación de correlaciones a favor de las fuerzas patronales, la división de la unidad de los trabajadores, para poner obstáculos adicionales en el desarrollo de la línea de lucha anticapitalista en los sindicatos.

LA LUCHA PARA EL REAGRUPAMIENTO DEL MOVIMIENTO OBRERO–SINDICAL

27. El KKE contribuyó decisivamente para que una parte significativa de la clase obrera resistiera y mostrara excepcional resiliencia, mantuviera viva la importancia de la organización sindical militante. El KKE reunió fuerzas, reagrupó sindicatos y educó a una nueva generación de militantes con la orientación de lucha contra los capitalistas, el Estado y sus mecanismos, sus alianzas imperialistas.

Esta acción del KKE contribuyó, especialmente durante los años de la anterior crisis capitalista, a que la situación de retroceso del movimiento sindical obrero no fuera total. La situación aún peor del movimiento obrero-sindical en Europa y otros países capitalistas se habría generalizado también en Grecia, si la acción del KKE, sus miembros y otros luchadores en los sindicatos, con el PAME, no pusiera obstáculos frente al ataque total del capital y en la desorganización del movimiento.

El porcentaje que adquiere la lista que formamos en la Confederación General de Trabajadores de Grecia (GSEE) se mantiene acerca de 20% (19,5% y 9 escaños en el último congreso con las exclusiones). En el sector público, registra un aumento por cuarta vez consecutiva en el congreso de la Administración Suprema de Asociaciones de Funcionarios Públicos (ADEDY) y está al 19%.

Las fuerzas que apoya el Partido tienen la mayoría en 14 Federaciones, 20 Centros Laborales y tenemos representantes electos en los órganos de 46 Federaciones y 69 Centros Laborales. Intervenimos en cientos de sindicatos y podemos establecer nuevos objetivos y planes en cada sector para la ampliación del PAME con nuevas fuerzas.

Hemos acumulado importante experiencia positiva y negativa en la elaboración de tácticas. Hemos formado una subestructura ideológica, política y organizativa crucial como Partido y fuerza dentro del movimiento, capaz de luchar para cambiar la situación actual en la dirección de fortalecer la unidad de la clase obrera, su orientación clasista para el contraataque obrero-popular, para liderar la alianza social en una dirección anticapitalista–antimonopolista.

Sin embargo, no debemos subestimar los factores objetivos que han contribuido al distanciamiento de sectores de la clase obrera de la organización y acción sindicales de clase, en combinación con las aspiraciones del capital de dar un golpe al papel de los sindicatos como forma inferior de organización de la clase obrera. Para el KKE, elevar los requisitos de su capacidad de acción es un elemento de fortalecimiento. Al mismo tiempo debemos resistir constantemente la presión que ejerce la correlación de fuerzas negativa hacia la integración, pero también la subjetividad de que la intervención del Partido es el único factor para el derrocamiento de esta correlación negativa. Ante las nuevas y más difíciles condiciones de la lucha de clases que tenemos que afrontar, examinamos los factores objetivos pero también las debilidades subjetivas, si y cómo hacemos todo lo posible en la acción del Partido.

Hemos definido el contenido principal del reagrupamiento del movimiento obrero como la preparación y desarrollo de la capacidad de actuar con decisión y eficacia, en alianza con las capas populares de los trabajadores autónomos de la ciudad y del campo, contra la estrategia elaborada unificada del capital y el poder capitalista. El XXI Congreso debe ocuparse de la cuestión de adaptar la acción a la tarea estratégicamente importante del reagrupamiento del movimiento obrero.

A pesar de los pasos que se han dado para entender la necesidad de trabajar dentro de la clase obrera y su movimiento sindical, no hay o no se aplica con estabilidad en todos los sectores y a nivel local, en los barrios, municipios, ciudades y pueblos, un plan integrado de organización y movilización de masas obreras-populares, de funcionamiento y acción de las organizaciones sindicales, la creación de nuevos sindicatos, cambio de la correlación de fuerzas dentro de los sindicatos, con el fin de contar pasos, resultados, y a continuación corregir lo que es necesario.

Al mismo tiempo, aún no se ha logrado una percepción unificada del  siguiente tema: "El Partido Comunista actúa tanto de forma autónoma como en el movimiento". Este elemento de nuestra acción, derivado del hecho de que el propio Partido Comunista es la forma superior y consciente de expresión del movimiento obrero, a veces aparece como dos tareas que no se pueden combinar en la práctica; a veces el trabajo sindical está completamente separado con el trabajo partidario-político o se identifica con este. Seguimos enfrentando problemas en la forma en que se entiende en la práctica la relación del Partido con los sindicatos. Estos temas se vuelven más complejos en condiciones de retroceso del movimiento, nos privan de un mayor impulso en nuestra acción y, al mismo tiempo, no crean condiciones favorables para la construcción del Partido, que es un factor clave para el auge del movimiento obrero.

Conclusiones de las luchas y los esfuerzos para crear focos pioneros de resistencia y lucha en los centros de trabajo

28. El período transcurrido desde el XX Congreso hemos librado luchas importantes en condiciones en las que hubo rápidos desarrollos en la economía capitalista. La crisis capitalista fue seguida de una recuperación débil y una nueva crisis capitalista en condiciones de pandemia, que objetivamente dio origen a nuevos requisitos en la lucha y nuestra intervención en el movimiento obrero-sindical. Durante ese tiempo buscamos aclarar de manera oportuna y acertada la naturaleza de los desarrollos, fortalecer los elementos del debate en cada fase, elaborar tácticas, lemas, marcos de lucha. Esto nos permitió tomar la iniciativa y desarrollar acción avanzada. Sin embargo, hemos evaluado que el contenido del enfrentamiento y esta orientación no fueron asimilados a tiempo por todos los miembros del Partido. Sin embargo, se ha adquirido una gran experiencia en cómo se ha intensificado la lucha contra la estrategia del capital y cómo han respondido los Órganos de dirección y los Grupos Partidarios.        

Ha habido varios casos en los que grupos empresariales han impulsado o incluso montado descaradamente "movilizaciones obreras", han utilizado sus empleados con el fin de reclamar al gobierno mayor apoyo que sus competidores, aprovechando el miedo de los trabajadores de que si la empresa no recibe apoyado, serán despedidos. En tales condiciones, se intensifican la manipulación y la presión sobre los trabajadores. Los asuntos “urgentes” que los preocupan como lo que ocurrirá con los puestos de trabajo, sus ingresos, el futuro incierto en condiciones de alto desempleo, son insoportablemente apremiantes. Es necesario que haya precedido una fuerte intervención ideológica y política y la experiencia de las luchas, para que los trabajadores puedan aguantar, promover sus propias demandas y no sucumbir a las aspiraciones de los patrones.

Los grandes proyectos de inversión, por los que chocan los monopolios, utilizan metódicamente las movilizaciones populares por los problemas existentes, buscando promover sus propios intereses y bloquear los planes de sus competidores, en el puerto del Pireo y otros puertos. Los conflictos entre monopolios a menudo conducen a compromisos rentables, pero dolorosos para los derechos de los trabajadores y la calidad de vida de los residentes. Las fuerzas del reformismo-oportunismo sirven constantemente a tales aspiraciones, desorientando la lucha de clases, integrando al movimiento obrero-sindical en los planes burgueses. Utilizan su propio marco de lucha que tenían en el movimiento sindical, para arrastrarlo bajo la bandera de los intereses empresariales. La lucha para que se no queden los obreros atrapados en una u otra versión del capital también requirió la elaboración adecuada de un marco de lucha más avanzado, como la combinación de reclamaciones para todos los trabajadores en el puerto del Pireo contra el ataque escalonado, con demandas que concuerdan con el lema “puerto-propiedad del pueblo” y la dirección de lucha necesaria para que este lema se convierta en realidad.

Partidos burgueses y oportunistas y las fuerzas del sindicalismo patronal y gubernamental están promoviendo el lema de la "reconstrucción productiva" en el contexto de una variedad de programas. La "reconstrucción productiva" es de hecho sinónimo del objetivo de la recuperación capitalista y del cambio del "modelo productivo", a pesar de que de vez en cuando se disfraza con consignas que parecen radicales. Hoy, por ejemplo, promueven el "crecimiento verde", promoviendo objetivos como la "descarbonización" en nombre del "cambio climático". Estos son los objetivos que se utilizan para atrapar el movimiento en diversas versiones de la política burguesa.

La GSEE y las grandes federaciones del sindicalismo patronal-gubernamental promueven un marco integral de especialización de las orientaciones estratégicas del capital, complementario y en algunos casos más especializado que el “Informe de Pissarides” reproduciendo ilusiones de que el desarrollo capitalista puede ser beneficioso tanto para los patrones como para los trabajadores.             

Los dos caminos de desarrollo -uno a favor del capital, otro a favor del pueblo- serán la principal línea de enfrentamiento en el próximo período en el movimiento obrero sindical, que encontrará su expresión en cada sector. Centrándonos en los sectores de importancia estratégica, se requerirá una acción más estable, persistente, planificada en cada sector, con elaboración especial para cada centro de trabajo y sindicato, con el objetivo de agrupar fuerzas, cambiar la correlación y construir fuertes organizaciones del Partido.  

En todo caso, se confirma que se necesita un trabajo ideológico, político y organizativo superior del Partido y una elaboración continua del conflicto  ideológico-político dentro de las filas del movimiento, contra las fuerzas políticas burguesas, los patrones, el Estado, la estrategia del capital en su conjunto, pero también contra el oportunismo. A través de la intensificación del trabajo ideológico-político y el desarrollo de la capacidad de los comunistas a especializar en cada movimiento por centro de trabajo, rama, etc., se puede promover la organización, la agrupación y la agitación de los trabajadores, el aumento de la influencia política del KKE dentro de la clase obrera, que es un factor decisivo para la radicalización de la conciencia, el fortalecimiento de la acción política clasista de los trabajadores, que planteará el tema de los derrocamientos radicales a nivel de poder.

 

29. Con el movimiento en retirada y el ataque de la burguesía cada vez más fuerte, el esfuerzo por organizar la lucha, formular demandas y reivindicaciones requiere un estudio constante, un contacto vivo con los centros de trabajo y  ajustes necesarios que revelen los planes del capital y de sus gobiernos, los impasses del sistema capitalista y aprovechen la más mínima posibilidad que se presente para agrupar a los trabajadores, ayudarles unirse y participar en la lucha colectiva. Centramos nuestra atención en el objetivo de convertir la organización sindical de base en un valioso instrumento de lucha obrera, un arma para fortalecer la organización de la clase trabajadora, su postura combativa en la reivindicación de sus derechos como condición previa para orientar la lucha contra el capital y su poder, en combinación con la influencia de las ideas comunistas, sino también los desarrollos generales que determinarán el resultado de la lucha de clases.

En la fase actual, es necesario asimilar como orientación política que la formación de los marcos de lucha requiere tener vínculos profundos con la clase obrera, tomando en cuenta su situación actual, sus necesidades, sus problemas, sin incorporarnos ni asimilarnos, evaluando en todo caso el nivel, la experiencia acumulada en cada sector y centro de trabajo. Jugamos un papel principal en la organización de la lucha obrera como condición previa para comunicar, para formular las demandas junto con los propios trabajadores, que es un elemento de educación combativa, y para plantear la necesidad de reclamar todas sus necesidades y derechos. Especialmente en la situación actual, los trabajadores en todos los centros de trabajo y sectores tienen enormes y agudos problemas. Hay centros de trabajo y sectores donde los trabajadores están mal remunerados o que no se pagan regularmente, con horario flexible, etc., pero hay otros centros de trabajo y sectores donde los problemas aparecen de otra forma, no tan extrema. Al mismo tiempo, los problemas de los trabajadores no están determinados exclusivamente por el nivel del salario, sino también por la política general, de Seguridad Social, la Salud, la Educación, etc. Somos conscientes de que el marco de la lucha por la satisfacción de las necesidades contemporáneas no es adoptado desde el principio por todos los sindicatos, por los trabajadores y por todos los sectores de la clase obrera ya que están objetivamente influidos en primer lugar por la situación que experimentan en su centro de trabajo, en su sector. Decisivamente debemos superar hablar con lemas generales o limitar nuestra propia intervención a la correlación negativa dentro del movimiento o una movilización.

El aumento del grado de organización de la clase obrera es el resultado de una combinación de muchos factores, junto con la intervención crucial de Partido. La ausencia de la lucha es un terreno fértil para el derrotismo, mientras que la participación crea las condiciones para ganar experiencia combativa, la confianza en uno mismo.

En particular, la lucha contra los relaciones laborales flexibles, en todo su espectro reaccionario, está evolucionando objetivamente en un conflicto con una elección estrategia del capital, que se promueve en todos los sectores como tendencia general, que prevalecerá hasta el derrocamiento revolucionario. Es un terreno de confrontación que, bajo la intervención de los comunistas, puede llevar a conclusiones generales sobre el sistema de explotación y el objetivo hacia el cual se debe dirigir la lucha del movimiento.

Las demandas relativas a aumentos salariales, los convenios colectivos, las jornadas laborales fijas, la abolición de las horas extraordinarias y la reducción de las horas de trabajo etc., son demandas vitales que chocan con el corazón de las reformas burguesas. Al mismo tiempo las necesidades de las familias populares constituyen una línea de agrupación, de intensificación de la lucha y de confrontación con la estrategia del capital. Son demandas con orientación de clase que pueden llevar al auge de la lucha, al mejoramiento de la organización, siempre que las elaboremos adecuadamente, no mecánicamente, tomando en cuenta todos los factores, en el contexto de lucha dentro del movimiento sindical. Trabajamos teniendo la convicción de que el auge de la lucha de clases y el reagrupamiento también pueden proporcionar algunos beneficios inmediatos en una u otra medida. Utilizamos la lucha y las conquistas para que la clase obrera se dé cuenta de la necesidad de derrocamientos radicales.

 

30. Nuestro Partido ha elaborado correctamente el marco reivindicativo en torno a las necesidades contemporáneas de las familias obreras-populares y lo ha planteado en el debate dentro del movimiento. Esta cuestión fue señalada con énfasis en el XX Congreso. Las necesidades contemporáneas conciernen todos los aspectos de la vida (salarios, condiciones de trabajo, salud, educación, vivienda, ocio, recreación, vacaciones, utilización de las tecnologías nuevas al servicio de las personas, etc.). Tenemos en cuenta que varias cuestiones planteadas por el sistema político burgués, como son el derechismo individual, las teorías irracionales sobre el “género social”, etc. influyen en la configuración de la conciencia social. Son temas que preocupan al movimiento obrero-popular también y que gozan de popularidad entre las edades más jóvenes. Al señalar todas las necesidades contemporáneas, se da la oportunidad de fortalecer la reivindicación, de orientar la lucha contra las causas verdaderas, mostrando a la vez los límites del sistema capitalista, iluminando las posibilidades y las condiciones para satisfacer estas necesidades. Nuestro objetivo es hacer que todo esto llegue a constituir una causa de la clase obrera y de las demás fuerzas sociales aliadas. Es cierto que dicho marco no se adoptará de un día para otro. Al principio se adoptarán asuntos que están en el punto de mira, habrá escaladas y también retrocesos mientras avanza la lucha de clases. Su reivindicación integral se irá logrando en el curso de la lucha de clases, con el mejoramiento evidente de la correlación en la lucha política, con la sacudida del poder burgués y, ciertamente, en condiciones de ascenso revolucionario. La satisfacción final de las necesidades sociales contemporáneas que siguen ampliándose constantemente es una cuestión del poder revolucionario y de la construcción socialista-comunista.

 

31. En los frentes de lucha importantes, hemos elaborado y actualizado nuestras metas como el tema de los salarios y los Convenios Colectivos, el sistema de seguridad social, las cuestiones de seguridad y salud en los centros de trabajo, las relaciones laborales flexibles, los contratos de tiempo determinado y los programas que esencialmente reciclan el desempleo en el sector público, el sueldo mínimo y la lucha contra la privatización de grandes unidades de producción como la Empresa Pública de Electricidad (DEI), la LARCO y otras. Nos esforzamos por integrar la lucha para abordar problemas cada vez más agudos en ciertas empresas y sectores (privatizaciones, despidos, trabajo no remunerado, etc.) en la lucha más general por los derechos de los trabajadores y de las capas medias populares.

En una serie de ramas, donde –desde el punto de vista de nuestras propias fuerzas- había mejores posibilidades de organización, de experiencia, de intervención más estable, obtuvimos algunos resultados (por ejemplo en la zona de reparación de barcos, en los trabajadores en la construcción, en empresas del sector financiero, como “Mellon”, “First Data” y otras). Estos resultados han llevado también a romper con el retroceso continuo en las demandas, a fortalecer la lucha reivindicativa, a revitalizar y a reagrupar el movimiento, a consolidar los sindicatos de base. La elaboración de Convenios Colectivos de Trabajo en ciertos sectores, donde existen fuerzas partidarias y sindicatos, como en las Telecomunicaciones y las Finanzas, ha contribuido en cierto grado a aumentar la participación de trabajadores jóvenes, especialmente mujeres, confirmando que podemos atraer a la lucha a las generaciones más jóvenes sin experiencia de luchas sociales.

Nuestra intervención y nuestra iniciativa con el fin de que los sindicatos desarrollen tales luchas, no se han generalizado más allá de los grandes sindicatos que operan principalmente en Ática. Tal intervención y desarrollo no son un frente de lucha fácil, no garantizan necesariamente una escalada. Se ha formado una nueva situación: la masa de jóvenes que trabajan sin haber conocido convenios colectivos de trabajo y otros derechos de generaciones anteriores va creciendo y constituye hoy en día la gran mayoría. Por regla general, el monto y las formas de remuneración se basan en una multitud de relaciones laborales flexibles, donde prevalecen los contratos individuales.

Dentro de esta situación objetiva, nos encontramos ante una esquematización y un estancamiento temporal en reivindicaciones anteriores. El ajuste necesario fue difícil de entender; tanto la situación general negativa como nuestras propias debilidades no nos permitieron organizar la lucha a nivel sectorial de manera estable y aprovechando la iniciativa de la agrupación de 530 sindicatos que demandaban la firma del Convenio Colectivo de Trabajo General Nacional y aumento salarial.

Los órganos de dirección y los Grupos Partidarios deben insistir en orientar y especializar el marco de lucha también para ciertos sectores de la clase obrera -como son las mujeres, los inmigrantes, los jóvenes trabajadores y los aprendices– para que se mejoren más decisivamente la organización y participación de estos sectores en los sindicatos, para que se destaquen cuadros sindicales, especialmente mujeres e inmigrantes, es decir, pertenecientes a sectores de relevancia donde hemos quedado atrás.

Asimismo, nos han preocupado asuntos de dirección en nuestra intervención acerca de otros problemas que conciernen al conjunto de fuerzas obreras y populares, como son la Seguridad Social y la Salud. Antes de la pandemia, así como durante su manifestación, abrimos la discusión sobre la situación del sistema público de salud, las demandas con respecto a los hospitales y la Atención Primaria de Salud (APS). Se intentó llevar a cabo movilizaciones que contribuyeron al cambio de correlación de fuerzas en sindicatos de grandes Unidades Públicas de Salud, en la Federación de Médicos Hospitalarios; también nos esforzamos en coordinar a los sindicatos obreros con las organizaciones de trabajadores autónomos, las asociaciones de la Federación de Mujeres de Grecia, las asociaciones campesinas. Sin embargo, en algunos casos de movilizaciones, ante todo en barrios cuyos Centros de Salud u otras estructuras de Atención Primaria de Salud no contaban con médicos, enfermeras, infraestructura, etc., no evitamos el error de trasladar de manera mecanicista la posición del Partido acerca de la Atención Primaria de Salud, es decir la necesidad de cambios sociales y derrocamientos políticos radicales a nivel del poder, que garantizan el derecho del pueblo a la salud, planteándola como condición a adoptar por las juntas directivas sindicales. De esta manera, se invalidó en la práctica el intento de máxima agrupación de organizaciones del movimiento de masas de la región.

 

32. En algunas ocasiones, existe la percepción que identifica la promoción de las posiciones del Partido por los comunistas, con la formación de marcos de lucha, sin ninguna elaboración y escalada, pues se considera que esto nos protege cuando intervenimos en una movilización sobre problemas graves  que se realiza bajo la iniciativa se ha tomado por otras fuerzas políticas, sobre todo socialdemócratas y oportunistas. Por supuesto, la combinación de la formación de marcos de lucha y el debate en el movimiento es muy exigente. Se requiere el seguimiento constante de los acontecimientos, conocimiento de los problemas y elaboración de los argumentos que resalten sus causas y contribuyan a la agrupación de fuerzas obreras-populares en la lucha contra la estrategia del capital y las políticas de los gobiernos burgueses.

Es un asunto crucial para nuestra intervención, asimilar y expresar en la práctica que la acción de los comunistas y el enfrentamiento con la influencia de las fuerzas burguesas al movimiento, la lucha contra la patronal, los diversos mecanismos estatales que intervienen de manera organizada, con plan y elaboración dentro del movimiento, no es algo menos exigente de la acción ideológica y política independiente del Partido. Al contrario, es más compleja, sobre todo en condiciones de una correlación de fuerzas negativa, pérdida de las características de masa por los sindicatos, desmovilización y conservadurismo. Hay que entender a fondo que el debate en las filas del movimiento no puede llevarse a cabo con la transferencia mecanicista o la simple copia de la propaganda central del Partido, las iniciativas políticas centrales o locales del Partido. Los sindicatos se forman por obreros y obreras, con un distinto grado de conciencia de clase, que se expresa a través de distintas percepciones e influencias ideológicas y políticas, de distinta experiencia y acción sindical, mientras que la lucha sindical, por su naturaleza, se desarrolla en torno a las condiciones de venta de la fuerza de trabajo y solo bajo la intervención de los comunistas es posible que los sindicatos sigan el camino de la lucha antimonopolista-anticapitalista.

Los cuadros y los miembros, que actúan en las filas del movimiento obrero sindical, con su acción de vanguardia deben adquirir la capacidad de llevar a cabo el debate ideológico de manera viva, bajo condiciones de movimiento de masas, dirigiendo a las fuerzas obreras que no pueden rechazar fácilmente las percepciones liberales burguesas, socialdemócratas y oportunistas arraigadas. Deben desarrollar su capacidad de tener en cuenta las masas obreras-populares que no participan, son desilusionadas, pasivas, atrapadas en el marco de la solución individual, luchando contra los factores que las neutralizan. Buscamos que el debate en las organizaciones sindicales apoye los criterios de selección de demandas, revele el mecanismo de la explotación, enriquezca y profundice el carácter anticapitalista-antimonopolista de la lucha, contribuya a la organización y participación activa de los trabajadores, confronte la influencia reformista-gubernamental o sindical-oportunista, por lo que depende por los miembros y los cuadros del Partido. Nuestra intervención debe apuntar al oponente de clase y no solo al respectivo gobierno, fomentar la necesidad de ampliar la lucha sobre derechos y necesidades, la composición de varios frentes de lucha (salud, educación etc.). Debe subrayar los términos y las condiciones de resistencia y contraataque a la estrategia elaborada del capital, iluminar las capacidades de satisfacer las necesidades crecientes populares.

Un asunto central del trabajo de dirección de los órganos es cómo se utilizan las armas y los recursos ideológicos que ha formado el Partido, ya que muchas veces los problemas que enfrentamos están relacionados con vacíos, deficiencias de asimilación de las posiciones y de las elaboraciones ideológicas cruciales, dificultades en la especialización de la política del Partido, en cada sector y centro de trabajo. Hacia esta dirección, el estudio continuo y la generalización de la experiencia contribuirán de manera decisiva en como trabajamos en la práctica, con la línea y las posiciones del Partido.

 

33. Durante la pandemia, nos hemos encontrado en una situación sin precedentes, en que se debería seguir la acción del Partido, dentro de la clase obrera y planificar la respuesta del movimiento obrero a la política burguesa, que sacrifica las necesidades sociales para asegurar el funcionamiento del sistema capitalista, las ganancias de los grupos empresariales. La experiencia que se ha adquirido por la escalada en el contenido y las formas de lucha, en condiciones de limitación a la circulación, miedo y obstáculos en la lucha política de masas, es crucial para el futuro. De la primera concentración de los médicos hasta la concentración del Primero de Mayo y a continuación la primera huelga general en noviembre, durante la pandemia, se ha llevado a cabo mucho trabajo para la formación de objetivos, demandas, enriquecimiento y escalada de las formas de lucha y de propaganda.

La experiencia acumulada por las movilizaciones demuestra que es muy importante que el Partido tome iniciativas, con la acción de sus cuadros y sus miembros, no solo para revelar asuntos, sino también para intervenir masivamente en las filas de los trabajadores, plantear demandas, un plano y orientación correctamente, desde el principio, independientemente de la dimensión que adquieran. La ayuda brindada por los dirigentes debe alentar la iniciativa desde abajo, el buen conocimiento de la situación en cada centro de trabajo, sin subestimar ningún problema, que puede ser la gota que colma el vaso, cada vez, para desarrollar inmediatamente acción en el lugar donde se intensifica la situación. Sobre todo, se requiere estar preparado para intervenir a los problemas que surgen por la situación política, en general, como recientemente, por la pandemia. En este caso, es posible tener resultados inmediatos, en las luchas, sobre todo en el ascenso de la conciencia política de clase.

Mientras se forman condiciones de movilización menor o mayor en torno a  problemas intensificados, los miembros del Partido están en la primera línea e intervienen, incluso cuando estas se desarrollan por las organizaciones y agrupaciones donde no tenemos la mayoría o no tenemos representantes. Cada vez, estudiamos la forma y la escalada de nuestra intervención, de manera colectiva y concreta. Esto tiene que ver también con nuestra posición hacia las movilizaciones que consideramos necesarias, en huelgas de sectores que se organizan por Federaciones y mucho más por sindicatos del primer grado, para que intervengan los comunistas con los simpatizantes y los sindicalistas que se agrupan al PAME, participando en el bloque de sus sindicatos. En estos asuntos de táctica es un error cualquier enfoque esquemático o copia de otros casos, donde la distinción se evalúa en el lugar y en el tiempo de una concentración.

Tenemos la capacidad y es necesario evaluar a tiempo y de manera objetiva las actitudes de las masas, que los comunistas intervengan de manera planeada y organizada como vanguardia en el contenido, la dirección, las formas de organización y lucha, jugando un papel principal en los procesos masivos colectivos, con precaución y flexibilidad en la ampliación, sin dejar aparte los elementos de vigilancia, de debate ideológico y político.

EL CURSO DEL PAME Y LA AMPLIACIÓN DE LAS ORGANIZACIONES SINDICALES QUE AGRUPA, ES UN FACTOR CRUCIAL PARA EL REAGRUPAMIENTO

34. La creación y la acción del PAME, durante todos estos años, ha demostrado ser una decisión de gran importancia. Fue fundado a partir de la iniciativa de los comunistas que desarrollan una acción de vanguardia, en el movimiento obrero-sindical y es una agrupación de clase de federaciones, centros laborales, sindicatos y sindicalistas, con una línea de lucha en dirección anticapitalista-antimonopolista, una conquista importante para el movimiento, como estimamos en el 20o Congreso.

La evolución de su curso y su alcance es crucial. Se ha convertido en un punto de referencia, expresa la necesidad del reagrupamiento y del contraataque del movimiento obrero-sindical, de la existencia de un polo de clase distintivo, luchando contra el sindicalismo patronal-gubernamental y contra la línea de la corriente oportunista.

En 1999, en su fundación, con una reunión de sindicalistas que tuvo lugar en el Estadio de la Paz y la Amistad, se representaron 230 sindicatos de primer grado y 18 organizaciones sindicales de segundo grado, Federaciones y Centros Laborales.

Hoy, después de su 4a Conferencia Nacional, en 2016, se agrupan en el PAME, 335 sindicatos de primer grado, 25 organizaciones sindicales de segundo grado (9 Federaciones y 16 Centros Laborales). Sin embargo, este curso positivo no debe traer ninguna complacencia porque no anula la pérdida de las características de masas de los sindicatos y los problemas en su funcionamiento y acción.

Durante los años siguientes, se han dado pasos importantes para enfrentar percepciones y costumbres anticuadas, fenómenos que convierten al PAME en una facción del partido. Se han dado pasos para hacer claro, sobretodo a las fuerzas del partido, su carácter como un frente de agrupación de organizaciones sindicales y sindicalistas, que se reúnen en nivel nacional, basado en un marco de lucha que se elabora y se enriquece, teniendo en cuenta los acontecimientos. Se ha adquirido una rica experiencia, sin embargo, hace falta tener una orientación estable en los órganos de dirección, en las OBP y los Grupos Partidarios, a causa de la propia situación del movimiento obrero-sindical, para confrontar los errores, las dudas y los retrasos que atrapan la dinámica existente.

A pesar de solucionar confusiones organizativas, como por ejemplo dónde y si se establecen Secretariados regionales, que los secretariados no reemplazan los sindicatos, siguen los problemas sobre la existencia y la función de los Secretariados sectoriales que se establecieron durante los años anteriores. Hoy en día, podemos enfrentar estos problemas desde una posición mejor.

Es una responsabilidad de los cuadros y los miembros del KKE que son electos en los órganos y participan en las organizaciones sindicales de la clase obrera, de fortalecer el papel de los propios sindicatos que se agrupan en el PAME para que se garantice y se amplíe como agrupación de clase en el movimiento sindical, que actúa en condiciones de procesos colectivos y masivos, con la participación activa de los trabajadores y no se limita en los marcos estrechos que impone el control estatal de la actividad de masas. Es una responsabilidad, garantizar la función y la acción de los sindicatos y a través de nuestra actividad, hacer madurar dentro de sus líneas y confirmar su agrupación en el PAME, profundizar su acuerdo con la línea de lucha en dirección anticapitalista.

Debemos tener en cuenta y no menospreciar el hecho de que, en el conjunto de los miembros de un sindicato que ha tomado una decisión colectiva de participar en el PAME, hay distintas opiniones y, por supuesto, desacuerdos, prejuicios y confusiones. Incluso allí donde los comunistas son la mayoría u ocupan la primera posición, no es correcto interpretarlo como un acuerdo en total, con el marco y la línea del PAME, aún cuando se reconoce el principio de la lucha de clases y se acepta como objetivo declarado la abolición de la explotación, en el estatuto del sindicato.

El trabajo de los comunistas para elaborar las posiciones y las consignas en cada sector, en cada sindicato, para elaborar las demandas y los argumentos adecuados, el marco de lucha, la planificación de la acción, para optar por las formas de lucha apropiadas, es también necesario en los sindicatos que participan en el PAME. Es aún más necesario en sindicatos que no participan en el PAME, en organizaciones sindicales donde los comunistas son minoría o sin representación, aún más en lugares de trabajo donde no hay representación sindical. Debemos tomar conciencia y separar la crítica hacia opiniones que expresan los trabajadores, de la crítica hacia los líderes del sindicalismo gubernamental-patronal o hacia la línea de las fuerzas oportunistas, porque en el primer caso, no nos dirigimos al oponente del clase, sino a los trabajadores cuyo interés, objetivamente, es entrar en conflicto con los capitalistas y su Estado, luchar con nosotros para derrocar el capitalismo.

Veintiún años después de la fundación del PAME, es necesario seguir con nuevas iniciativas, con objetivos y planes, centrales o en cada sector, hacernos aún más capaces a través de la acción en el movimiento obrero-sindical, contribuir para que el PAME sea su vehículo principal, representando sectores más amplios de la clase obrera. Y como consecuencia, ampliarse a través de las luchas para lograr mayorías en nuevos sindicatos, Federaciones, Centros Laborales, con un plan de masificación de los sindicatos y creación de nuevos, organización de nuevas masas obreras fortaleciendo aún más su influencia, llevando a la lucha común los sindicatos donde los comunistas no son la mayoría. Todo esto en combinación con la intervención ideológica-política de los comunistas, en el centro de trabajo, trabajador por trabajador, para ganar sectores de la clase obrera de manera estable con la política del KKE, emancipándolos de la ideología y política dominante.

La comprensión de esta cuestión es una condición previa para enfrentar un peligro existente, que es la complacencia y el compromiso en los órganos de dirección y los grupos partidarios, bajo el peso del retroceso del movimiento, por los muy pequeños pasos que se dan para la masificación de los sindicatos y la ampliación del PAME con nuevos.

 

35. Las organizaciones sindicales que participan en el PAME han tomado iniciativas que han llevado a la acción común con otros sindicatos que no se agrupan en el PAME, alrededor de frentes de lucha cruciales, un hecho que ha demostrado las nuevas posibilidades. En todas las iniciativas, aproximadamente 165 sindicatos, en total, que no se agrupan en el PAME, han decidido participar en las acciones comunes. La coordinación combativa ha llegado a tal punto, que en los últimos años, se han convocado huelgas generales cuatro veces, después de decisiones de sindicatos y organizaciones sindicales de segundo grado, superando la posición subversiva y abiertamente en contra de la huelga, de la mayoría en la dirección de GSEE. Este esfuerzo y la acción común con las agrupaciones radicales en el movimiento de los campesinos, los comerciantes, las mujeres, los jóvenes funcionan para despertar, para ejercer presión hacia las organizaciones sindicales donde las fuerzas que están en contra o no entienden la necesidad de la orientación de clase del movimiento son la mayoría.

Es necesario seguir manteniendo y aumentando el número de sindicatos y otras organizaciones de masas alrededor del PAME (que no pertenecen en el PAME), a través de procesos masivos,  debate, esfuerzo continuo, planificación en cada sector y región. A veces serán más, a veces serán menos, intentando que cada iniciativa del movimiento de clase sea un tema de debate con las demás fuerzas, con el fin de crear grietas.

Sin embargo, hay casos de sindicatos donde las fuerzas de orientación de clase son la minoría, donde la orientación del trabajo es distinta, ya que se considera que una propuesta de acción común con el PAME recibirá votos en contra, o si recibe votos a favor, ésta blanqueará el sindicalismo patronal y las fuerzas que son responsables para la situación del movimiento y  obtendrán una oportunidad de mejorar su posición. Al final, esta posición prácticamente no deja espacio y debilita el debate, pone obstáculos en la realización unificada de la orientación de asestar un golpe al sindicalismo patronal-gubernamental.

Intentamos agrupar sindicalistas y sindicatos, con una acción planificada, donde sea posible, a través de decisiones colectivas, pero también revelar a los trabajadores, las fuerzas que ponen obstáculos en la organización de su lucha o que intentan someter el contenido y el desarrollo de su lucha a los intereses capitalistas. Esta es la manera más esencial para que los trabajadores saquen conclusiones, a través de su propia experiencia, un proceso que, por supuesto, no es suficiente por sí mismo para la maduración de la conciencia revolucionaria obrera, sino que es un requisito importante.

Que el debate contra la línea patronal, gubernamental y también contra la posición oportunista, se lleve a cabo con procesos masivos en el sindicato del primer grado, por sector y empresa. Que no retrocedamos frente a las grandes exigencias de los procesos masivos de los sindicatos (asambleas generales, concentraciones, reuniones), a través de los cuales nuestras fuerzas también obtienen más experiencia y se vuelven más capaces. Esta es la base para cambiar la situación en los sindicatos y educar nuevas fuerzas para el movimiento.

Esta orientación no se ha conquistado profundamente y de manera unificada por el conjunto de los órganos de dirección y de los Grupos Partidarios centrales. Hemos adquirido una experiencia positiva de ciertas intervenciones sectoriales, como por ejemplo, en turismo y en los hospitales, donde los sindicatos con orientación de clase han desempeñado un papel de vanguardia en la unión de fuerzas y en la acción de varios sindicatos de su sector. Sin embargo, no hay un correspondiente plan y una orientación en todas las Federaciones y los Centros Laborales donde nuestras fuerzas son la mayoría y las iniciativas que toman se dirigen y agrupan pocos sindicatos, en comparación con los que ya son miembros de estos.

El sindicalismo gubernamental y patronal, el «cooperación social», a pesar del descrédito del GSEE, sigue predominando en las Federaciones principales y en los sindicatos de los sectores estratégicos (energía, bancos, transporte, telecomunicaciones), de los cuales obtiene su fuerza en GSEE. Es un elemento que pesará y pondrá obstáculos en la agrupación, durante los años siguientes. En estos lugares, se expresan casi todos los problemas que tienen que ver con la manera que trabajamos en los sindicatos, siendo la minoría. Por supuesto, las dificultades objetivas también pesan, porque a pesar del cambio en la composición de los centros de trabajo y de las relaciones laborales, la reducción de los trabajadores permanentes que los contrataban los grupos sindicales de los partidos gubernamentales, siguen siendo lugares donde hay un núcleo de la aristocracia obrera que ha mantenido un alto nivel de beneficios e ingresos, incluso durante la década de la crisis.

 

36. Desde el 20o Congreso del Partido, se ha reforzado el debate sobre el papel de los sindicatos, la orientación de la lucha, el ascenso del grado de organización. Se ha manifestado a través de luchas en las que los comunistas jugaron un papel principal, en los congresos de los centros laborales, de federaciones, en el propio Congreso de GSEE en Kalamata, Rodas, Kavouri, donde contribuyeron en la revelación de los mecanismos y los métodos de la patronal y del Estado burgués para la manipulación del movimiento sindical-obrero, el abierto y el encubierto soborno de conciencias, la intervención de la patronal sin pretextos. Se ha reforzado la confrontación con las fuerzas burguesas y oportunistas que unen sus fuerzas en contra del Partido, y del PAME también, utilizando formas y medios del movimiento (protestas, resoluciones, manifestaciones, ocupaciones, resoluciones extrajudiciales y recursos, entrevistas, artículos, preguntas parlamentarias).

También a través de estas confrontaciones, se ha destacado la posibilidad de ir unidos con los comunistas, los sindicalistas que no están de acuerdo con el conjunto de nuestra política. Algunos aguantaron más, algunos aguantaron menos, bajo presiones mayores, unidos con integridad, reconociendo que los comunistas en la vanguardia pueden organizar la lucha firmemente y defender los intereses de los trabajadores, reconocieron y tuvieron fe en la intervención para que cambie la situación mala del movimiento obrero-sindical, en la lucha contra el papel patronal en el que están sumergidas las cúpulas sindicales.

En todos los casos, nuestras fuerzas han salido más reforzadas en experiencia, se destacaron nuevos cuadros, un apoyo para los próximos años. Los cambios positivos en los consejos de los centros laborales han formado condiciones más favorables para la escalada de la lucha y del debate, pueden contribuir en el esfuerzo principal para aumentar la organización en las organizaciones sindicales de primer grado, una cuestión que no se soluciona automáticamente, sino requiere una orientación estable e iniciativas correspondientes. Sin embargo, aun quedan muchas federaciones y centros laborales donde no intervenimos, donde no hay ningún comunista electo.

La situación varía por ciudad y por sindicatos, con respecto a los sindicatos que se agrupan en el PAME, pero también a los sindicatos donde los comunistas son la minoría o no hay ningún comunista electo.  Es decir, que hay sindicatos que se enfrentan con problemas de funcionamiento y de capacidad para movilizar a los trabajadores.

La fuerza organizativa y la influencia del KKE en cada sector y centro de trabajo es un elemento crucial para cambiar la situación, se requiere la previsión a tiempo, la orientación estable y la planificación por parte de los órganos de dirección y los Grupos Partidarios, los lazos estrechos con las masas, la formación ideológica-política, la capacidad de maniobras, audacia e iniciativa para salir adelante.

 

37. En repliegue del movimiento obrero-sindical en nuestro país se ha visto afectado también por la situación en el movimiento sindical internacional, el dominio de los sindicatos “libres” a nivel mundial y europeo, el dominio de la CES (Confederación Europea de Sindicatos) en Europa que es parte orgánica de la UE. La GSEE participa y es miembro de la CES.

Nuestro Partido apoya la acción de la Federación Sindical Mundial (FSM). El PAME, como frente de agrupación de sindicatos y sindicalistas, participa en la FSM, y también en las federaciones sectoriales de la FSM y en su presidium.

Durante los años anteriores, se desarrolló un acción internacional muy significativa con campañas de información, coordinación de movilizaciones combativas, solidaridad con  grandes huelgas, en las que jugaron un papel principal las organizaciones que participan en la FSM, como por ejemplo en la India con millones de huelguistas, en Sudáfrica, en Francia, y otras.

La FSM se ha fortalecido con nuevas organizaciones desde todos los continentes (por ejemplo COSATU en Sudáfrica, en la India, y en Europa), que fue un objetivo en los años anteriores, con el desarrollo de acción común con organizaciones de segundo grado, como son la Unión Local de Marsella, uniones locales de distritos de París, la Federación de Petroquímica de CGT, sindicatos en Italia y en España.

El reconocimiento del PAME a nivel internacional es importante. Cabe destacar la concentración del Primero de mayo en 2020 que recorrió el mundo.

La FSM se fundó justo después del final de la II Guerra Mundial Imperialista, con la Victoria Antifascista de los Pueblos, el 3 de octubre de 1945 en París. Ha soportado la contrarrevolución y con la contribución de las fuerzas del KKE y de otros luchadores sindicalistas, a nivel mundial, ha desarrollado nuevas actividades revelando posibilidades de agrupación y de coordinación común.

El debate ideológico-político se desarrolla incluso en el marco de la FSM, donde se refleja la situación del movimiento comunista internacional. Incluso fuerzas burguesas pretenden aprovechar el debilitamiento de los reflejos anticapitalistas, la confusión ideológica que prevalece también en fuerzas comunistas que actúan en el movimiento sindical internacional. Sin embargo, se han formado mejores condiciones para desarrollar el debate sobre la correlación en cada una de estas organizaciones que participan en la FSM, su perspectiva, su marco de lucha, nuestra intervención.

 

EL ASCENSO DEL GRADO DE ORGANIZACIÓN ES UNA TAREA PRINCIPAL PARA LA AGRUPACIÓN DE LA CLASE OBRERA

38. Hoy en día, es más necesario pensar, sobretodo, en como se fortalecerá la sindical de los trabajadores en los centros de trabajo. Es una tarea crucial y un criterio básico de un accionar eficaz. La organización en el centro de trabajo, el ascenso del grado de organización de la clase obrera y los cambios de correlación son objetivos básicos y hay que luchar por conseguirlos, de manera unificada, en cada sector, en cada región.

Trabajamos activamente en todos los sindicatos, independientemente de la forma de su organización (sectoriales o empresariales o de profesiones afines). La situación en las mayores regiones del país, donde se concentra la mayoría de la clase obrera, en Ática y Tesalónica, en base a los sindicatos que se agrupan en los Centros Laborales de estas regiones, demuestra que la gran mayoría de los trabajadores sindicalizados (con el criterio de que han pagado sus suscripciones y  participan en elecciones sindicales) está en los sindicatos de empresas. De los votantes en los Centros Laborales de Ática, el 60% está en los sindicatos de empresas, el 23% en los sindicatos de profesiones afines y el 18% en los sindicatos sectoriales. Respectivamente, los porcentajes de los votantes en las elecciones de los sindicatos son los siguientes, el 61% en los sindicatos de empresas, el 31% en los sectoriales y el 21% en los sindicatos de profesiones afines.

Los sindicatos sectoriales pueden reunir a la gran masa de los trabajadores jóvenes que trabajan en condiciones de movilidad y flexibilidad, con nuevas formas de empleo, sin excluir el conjunto de los trabajadores de su acción. Pretendemos que los sindicatos sectoriales contribuyan sobre todo en la organización en los mayores centros de trabajo, que unan la lucha con los sindicatos en las grandes empresas, en cada sector y que coordinen sindicatos entre distintos sectores. La experiencia anterior y contemporánea ha demostrado que es difícil desarrollar luchas con éxito, si no se basan en una organización firme en cada empresa. Podemos especificar esta orientación, de manera más precisa, en cada sector.

Hay centros de trabajo, en todo el país, donde establecer nuevos sindicatos es fundamental, como por ejemplo el comercio al por menor concentrado (los centros comerciales de todo tipo), las cadenas alimentarias (supermercados), el turismo con cientos de hoteles, la industria de la manufactura de alimentos y otros. Donde haya sindicatos de este tipo desarrollamos una acción de vanguardia, pese a que nuestras fuerzas sean pocas. De otro modo, contribuimos, basados en plan, en la creación de sindicatos sectoriales y también de empresas en los mayores centros de trabajo, que pueden reunir todos los tipos de trabajadores, dentro de cada empresa, en centros comerciales, conjuntos de empresas.

Se requiere estudiar de manera más sustancial el contenido y las formas de nuestra intervención en sectores que tienen un desarrollo dinámico, se priorizan por el capital y están en una fase de concentración de nueva mano de obra. Respectivamente, es necesario estudiar los cambios internos también en sectores de importancia estratégica. Estos sectores y ramas son la energía, los transportes, las empresas de expedición de carga y de logística, el sector metalúrgico, la industria militar contemporánea, las telecomunicaciones y la informática, el reciclaje. Debemos estudiar los datos de su evolución, de su representación en la infraestructura partidaria y sindical, las exigencias, destacando los elementos objetivos que influyen y crean dificultades, como por ejemplo, la organización del movimiento sindical al nivel de federaciones, y también al nivel de sindicatos de primer grado que no corresponde a las evoluciones de un sector y no cubren el conjunto de los trabajadores en este, pero también las iniciativas respectivas para establecer nuevos sindicatos, adaptaciones, incluso cambios que son necesarios en la distribución de nuestras fuerzas o de los sindicatos que se agrupan en el PAME en un cierto sector.

Al nivel de las federaciones de segundo grado, optamos por la federación sectorial y no por las federaciones de profesiones afines que causan división y fragmentación.

Debemos contribuir en la fundación de sindicatos en regiones que combinan armoniosamente el trabajo en el centro de trabajo y en el lugar de residencia con buena preparación y concentración de fuerzas, pero debemos tener cuidado no establecer sindicatos de manera improvisada en cada municipio y región. Sobre todo en los centros urbanos de Atenas, de Tesalónica, hay municipios con gran población y concentración de miles de trabajadores, en sectores, como el comercio, la restauración y el turismo que no es posible cubrir por los existentes sindicatos, cuya sede está lejos y teniendo en cuenta el nivel actual de experiencia de los trabajadores de su participación en los sindicatos. No obstante, mientras y donde no haya sindicatos, debemos trabajar para establecer comités de lucha de trabajadores que pueden funcionar como una primera forma de sindicatos.

Al mismo tiempo, apoyamos y promovemos nuevas formas de organización, al lado de los sindicatos, que reunirán una gran parte de los trabajadores, que está en “precariedad”, bajo relaciones de trabajo flexibles, el trabajo en “negro”, bajo continua movilidad, sin conciencia de sector de trabajo. Tales iniciativas de organización y de acción colectiva son los centros de reunión de trabajadores y de juventud, los centros de reunión de trabajadores griegos e inmigrantes que funcionan en el marco de la solidaridad, de la expresión y acción colectiva, enseñando la lengua griega a trabajadores inmigrantes y refugiados que aunque no son formas de organización, dentro del marco oficial del movimiento sindical, sin embargo pueden unir a los trabajadores, educarlos en la organización colectiva.

Una cuestión principal es la acción de los sindicatos con respecto a los problemas de los inmigrantes, teniendo en cuenta que objetivamente son parte de la clase obrera de Grecia. Se ha demostrado, por la experiencia, que es una cuestión difícil. Sin embargo, nuestra acción en este frente, desde el período de la contrarrevolución, cuando empezaron a llegar de manera masiva, trabajadores de los antiguos países socialistas, sobre todo de Albania, pero también de países de Asia (Bangladés, Pakistán, la India) ha dado resultados positivos, en los sectores de construcciones, en la industria textil, de alimentos y otros. Por supuesto, durante el período de la crisis económica capitalista, se observa el fenómeno de que los inmigrantes vuelvan a su país o se vayan a otros países de la UE, mientras al mismo tiempo las guerras imperialistas en el Medio Oriente, aumentan los flujos de refugiados y de inmigrantes de países asiáticos (Pakistán, Afganistán, Iraq, Siria), pero también de países del norte de África.

Es necesario ocuparnos más sistemáticamente con los inmigrantes, como parte de la clase obrera en Grecia, para que se incorporen y luchen junto con los trabajadores griegos, tanto para sus problemas que son generados por el sistema de explotación, como para el conjunto de cuestiones de la clase obrera.

Además, aparte de la acción que los sindicatos deben desarrollar, con la intervención de los comunistas, para que las mujeres y los jóvenes trabajadores se organicen, deben utilizar más las posibilidades y los contactos de las asociaciones de mujeres con trabajadoras en el sector de comercio, de salud, de educación. Todo esto dará un impulso a los sindicatos e influirá positivamente en la adquisición de características masivas, en la medida que estos coordinan su acción y se ocupan activamente con todas las cuestiones que preocupan a la familia obrera-popular y los jóvenes. Hay una multitud de cuestiones para actuar, teniendo como punto de partida el lugar de residencia, en combinación con la confrontación de problemas en el centro de trabajo. Asimismo, pretendemos que las actividades en la cultura (música, teatro, libros), en los deportes, las acciones de solidaridad, con una intervención organizada en el ocio, sean núcleos de agrupación.

 

39. La disputa acerca del papel de los sindicatos es una lucha ideológica, política y organizativa dura, en primer lugar, contra los capitalistas y sus uniones, contra los gobiernos burgueses, los partidos burgueses y en consecuencia contra sus fuerzas en el movimiento. Hoy en día, los partidos burgueses y el gobierno vuelven a referirse a la situación del movimiento sindical, con el propósito de renovar su manipulación, de tomar medidas hoy para tiempos más difíciles.

Ha vuelto la invocación de lo no partidista, lo independiente, lo exento de identidad política partidista. Desde luego, el sindicato tiene autonomía organizativa, la cual nosotros defendemos enérgicamente contra la múltiple intervención de empleadores y del Estado. Además, está claro que el movimiento sindical, los sindicatos, no son partidos para tener un propio programa de poder. Se dirigen a todos los trabajadores, independientemente de su preferencia política e ideológica. Sin embargo, se encuentran constantemente enfrentándose a las consecuencias de la economía explotadora y de su poder, por lo tanto en confrontación y en conflicto no solo con cada capitalista, sino también con el gobierno, con los partidos burgueses. No hay neutralidad en los sindicatos. Por supuesto, esta confrontación no es uniforme, ya que no existe una conciencia política de clase uniformemente desarrollada. Conseguir que esta conciencia madure a través de las luchas, que se exprese en un grado u otro a través de las intervenciones de los sindicatos, es una cuestión compleja de la que se deben encargar los comunistas.

Mientras tanto, el Estado intenta asestarle un duro golpe al corazón del funcionamiento de los sindicatos, aduciendo, o bajo el pretexto, de problemas existentes. La falta de Asambleas Generales, de concentraciones, de visitas de sindicalistas a los centros de trabajo, los congresos caducados en salas vacías, con el solo objetivo de elegir juntas directivas y representantes, sin discusión ni debate, constituyen la degeneración a la que ha llevado una elección consciente. Para poner fin a las Asambleas Generales, se utilizan medios, como p. ej. el voto por correo electrónico, que se presentan como una modernización.

Esta orientación se realiza y coexiste con la escalada de represión y de obstáculos a la acción de los comunistas en el movimiento obrero sindical, con el fin de poner límites a la organización y acción sindical, especialmente a la agrupación de sindicatos de orientación clasista, al  Frente Militante de Todos los Trabajadores (PAME).

De acuerdo con la nueva “legalidad” que se está formando, en el próximo período habrá aún más casos en que las instituciones del Estado burgués (tribunales, etc.) y los empleadores no reconocerán sindicatos y decisiones colectivas, rechazarán la firma de convenios colectivos de trabajo basándose en pretextos legales, penalizarán la acción de organizaciones sindicales, incluso sus procedimientos de masas. El enfrentamiento del movimiento sindical-obrero con el control estatal aún más asfixiante de los sindicatos es un frente serio de intervención y lucha de masas, ideológica, política.

Durante el período de la pandemia, se ha acumulado una rica experiencia de “indisciplina organizada” y acción de los sindicatos contra las prohibiciones y medidas represivas adoptadas por el gobierno bajo el pretexto de la “crisis sanitaria”.

A través de la organización y participación masiva de los trabajadores en los procedimientos y la acción colectivos de los sindicatos, aspiramos no solo a cuestionar el marco legislativo reaccionario, sino también -en casos de diversas prohibiciones- a afianzar de facto la existencia, el funcionamiento, los procedimientos colectivos de los sindicatos; nos proponemos lograr que se ejerza la mayor presión posible sobre las entidades estatales y patronales para que se vean obligadas a tolerar, incluso a reconocer legalmente, la acción de los sindicatos. Pero también pretendemos revelar los límites de la legalidad burguesa.

Con el pretexto de la pandemia, se ha intentado imponer la elección de representantes para los consejos de servicio en Educación y en algunos otros sectores del Estado por votación electrónica. La abstención casi universal -más del 90% de los trabajadores de Educación no participaron en este proceso- muestra que los trabajadores tienen reflejos, son capaces de resistir, que se percatan de lo reaccionario de estas normativas.

 

40.La experiencia de las luchas en el movimiento sindical-obrero muestra cierta dificultad, cierta debilidad de los comunistas al orientar acerca del contenido de la acción en los sindicatos de base, para que estos sindicatos constituyan realmente organizaciones portadoras de la lucha de clases y que reúnan la mayoría de los trabajadores. Es un problema de dirección tanto de los órganos partidistas, especialmente de los Comités Sectoriales, como de los Grupos del Partido de las Federaciones, a cuya solución debe contribuir el propio Comité Central, la Sección para el Trabajo Obrero-Sindical. Debemos ser conscientes de los problemas existentes en la orientación de los miembros del partido a fin de que cambie el funcionamiento de los sindicatos de base, que no es bueno, y que corre el peligro de empeorar aún más en condiciones de mayor repliegue del movimiento.

El desarrollo de una red integral de organizaciones sindicales y la concentración de fuerzas contra el enemigo de clase no pueden realizarse sin mejorar y elevar, bajo la responsabilidad de los comunistas, el funcionamiento de los sindicatos; de modo que las juntas directivas estén al tanto de los problemas de sus miembros, de la situación en los centros de trabajo y en las ramas; que tengan una firme planificación de iniciativas para promover el marco de lucha, que se preocupen por encontrar caminos y formas que faciliten la participación de los trabajadores. Hay que hacer uso de todas las formas y posibilidades, para que el trabajador organizado -ya sea en el sindicato de la empresa o de la rama- desempeñe su papel y participe más allá de las elecciones. Hay que ayudarle para ser “el ojo y el oído” del sindicato en el centro de trabajo, en el departamento de producción donde trabaja. Para que forme inicialmente junto con los otros trabajadores sindicalizados un grupo -al principio incluso informal-, un comité del sindicato, que informará, que se enfrentará a los empleadores, que movilizará a los compañeros de trabajo. Un grupo que deberá constituir la primera forma de un posible comité sindical o de un comité de seguridad y salud. Que pueda afiliar otros trabajadores al sindicato. Es una cuestión de dirección de gran importancia para los próximos años: ampliar el círculo de obreros que trabajan activamente al lado de las juntas directivas de los sindicatos, aumentando de esta manera la infraestructura de las organizaciones sindicales, configurando al mismo tiempo el plan y las condiciones para lograr mayorías en sindicatos y Federaciones, lo cual no atañe unilateralmente la lucha en vistas de las elecciones.

Debemos preocuparnos por guiar a los miembros del KKE y de la KNE en lo que se refiere a su participación y acción tanto en los sindicatos como para enfrentar los problemas agudos de la familia popular en el lugar de residencia. Hace falta insistir para derribar cualquier barrera que sobreviva entre la acción del sindicalista comunista en el lugar de trabajo y su acción en el lugar de residencia; derribar la vieja apreciación de que el sindicato se ocupa solo de los problemas en el centro de trabajo; de que los otros problemas incumben a los camaradas de las organizaciones de base territoriales o a los camaradas encargados de los temas de la Administración Local.

El trabajo que exige, p. ej., afiliar trabajadores, hacer que participen en la acción de su sindicato es más complejo y difícil que en años anteriores. El gran descrédito de los sindicatos, el retroceso generalizado, constituyen obstáculos serios. Para dar los pasos requeridos, hay que desarrollar la confianza indispensable en el luchador de vanguardia - comunista - sindicalista. Por consiguiente, hace falta ser activos en todos los campos: debemos estar a la vista en el trabajo, en el barrio, en la Asociación de Padres, en el Centro de Salud; frente a cada problema, pequeño o grande, debemos tomar la iniciativa, fomentar la discusión en torno a todos los problemas en el centro de trabajo y estar constantemente alentando – a través de diversas formas e iniciativas - a participar en el sindicato. Estando en la vanguardia, lo que también significa trabajando acertadamente en lo ideológico-político para que se esté asimilando más ampliamente la necesidad de organizar la lucha enfrentándose a la estrategia del capital.

ES NECESARIO CONSTITUIR COMITÉS COORDINADORES DE SINDICATOS Y DE OTRAS ORGANIZACIONES DEL MOVIMIENTO O DE COMITÉS DE LUCHA EN ZONAS TERRITORIALES, EN EL BARRIO, EN LA CIUDAD

41. La coordinación y acción conjunta de sindicatos obreros y otras organizaciones de masas han contribuido como forma de intervención. Se han organizado movilizaciones y actividades de solidaridad en zonas afectadas por desastres naturales (Mandra, Mati, Lesbos, Karditsa, Samos). Los comunistas han llevado la delantera en organizar la solidaridad dentro de los sindicatos, pero también en resaltar las causas de las catástrofes, reclamando infraestructuras y servicios para la protección de desastres naturales (incendios, inundaciones, terremotos). Se han llevado a cabo de manera más planificada intervenciones, entre ellas también movilizaciones de masas contra la política de los gobiernos burgueses, de Periferias y municipios; política que concierne al medio ambiente y a la calidad de vida de las capas populares, a la gestión de residuos, a industrias que contaminan en Ática, El Pireo, Salónica Oeste, Volos y recientemente en Tesalia por causa de las turbinas eólicas. Son ejemplos de lucha del movimiento obrero en frentes más amplios que ha adquirido un carácter de acción coordinada de sindicatos obreros con sindicatos de trabajadores autónomos, con Asociaciones Campesinas, Asociaciones de Mujeres, de la juventud, con consejos estudiantiles, Uniones de Padres etc.

De particular importancia ha sido la intervención y el papel del Partido ante el agravamiento del problema de los refugiados en las islas y en zonas de Grecia continental, la actividad de vanguardia contra el confinamiento de los refugiados, a fin de contrarrestar las fuerzas reaccionarias que actuaban y actúan con el apoyo de aparatos de muchos tentáculos, estatales y otros, ONG, que pretenden asimilar fuerzas obrero-populares. Una experiencia valiosa ha sido la actividad de los Centros Laborales de Lesbos, Samos, Grupo Norte del Dodecaneso, de la Sección de la Confederación de sindicatos de empleados públicos (ADEDY) de la Prefectura de Quíos, que se situaron al frente de la reacción justificada de sectores amplios del pueblo contra la política gubernamental y de la UE, contra los planes y acuerdos imperialistas que son responsables del confinamiento de los refugiados. El pueblo rechazó la presencia de fuerzas represivas reforzadas en las islas, expresó su solidaridad con los refugiados, a la vez que aisló a los grupos fascistas con sus consignas.

 

42.  Las fuerzas del Partido y de la KNE nos proponemos contribuir, a través de la actividad planificada de vanguardia, a que se forme sobre la base de problemas agudos, a nivel territorial, en la ciudad o el barrio, un movimiento militante que agrupe ampliamente gente del pueblo; su orientación se fortalecerá dentro de la misma lucha. Al mismo tiempo nos proponemos crear fundamentos e infraestructuras de sindicatos sectoriales y empresariales en el espacio territorial. Mediante la ampliación del marco reivindicativo de los sindicatos más allá de las demandas laborales económicas, hay que luchar por la solución de todos los problemas obrero-populares, teniendo en cuenta su gravedad. Hay que crear condiciones para la acción común con las organizaciones de trabajadores por cuenta propia, con otras organizaciones de masas, con las Asociaciones de Mujeres, las Asociaciones de Padres, etc. En todo lugar, debemos encontrarnos en la primera fila a través de los sindicatos y de otras organizaciones del movimiento, para que los trabajadores se organicen y luchen por su sobrevivencia y sus vidas, para que se fortalezca la solidaridad, para que se coordinen las diversas secciones del movimiento.

En cada ámbito, la iniciativa de los comunistas debe apoyarse en posibilidades existentes; otras organizaciones se deben unir y movilizar por su parte en torno a demandas justas, que abrirán el camino para comunicarnos y luchar junto con fuerzas populares más amplias. Es probable que otras fuerzas políticas también intervengan a través de sus representantes en las organizaciones del movimiento, ya que se trata de organizaciones de masas. Por esta razón, se requiere una buena preparación acerca de todos los temas, demandas, marcos y formas de lucha.

A través de tal intervención, el movimiento puede emerger más masivo y fuerte en lo organizativo, puede dar pasos adelante en liberar fuerzas obreras y populares de la manipulación capitalista, para que no queden atrapadas ni en el sistema ni en ilusiones socialdemócratas y oportunistas, para que se reúnan con el Partido y la KNE. Puede dar pasos adelante en fomentar la alianza social, para que la lucha adquiera una orientación anticapitalista-antimonopolista.

CAPITULO D

SOBRE LA INTERVENCIÓN DEL PARTIDO EN LAS FILAS DE LOS ALIADOS DE LA CLASE OBRERA Y LA PROMOCIÓN DE LA ALIANZA SOCIAL

43. En el marco de la puesta en práctica de la Resolución Política del 20º Congreso, se organizó y realizó una Conferencia Panhelénica acerca de la intervención del Partido en las filas de los trabajadores autónomos de la ciudad y un Pleno Ampliado del Comité Central sobre el trabajo con los campesinos que luchan por sobrevivir. Los documentos de ambas Reuniones han sido publicados en una edición de “Sinchroni Epochi”. En el primer caso, el proceso de discusión interna fue anterior, en el segundo posterior, pero la discusión en las OPB respectivas aún no ha terminado. En ambos casos, queda confirmada la necesidad de dicho debate, a fin de formar un concepto más uniforme acerca de determinar a los aliados potenciales de la clase obrera, de orientar nuestra intervención en sus movimientos y de promover la acción conjunta con vistas a la alianza social con orientación antimonopolista-anticapitalista.

En el camino hacia el 21º Congreso y principalmente después de este, debemos luchar por poner en práctica las decisiones tomadas. La discusión en su conjunto está ratificando el enfoque de que, ante todo, los órganos de la dirección deben adquirir la capacidad de guiar nuestra intervención en las filas de estas fuerzas sociales, y de que no se trata estrictamente de una tarea de las fuerzas partidistas pertenecientes a los trabajadores autónomos de la ciudad o a los campesinos respectivamente. En este sentido, incluimos en las Tesis para el 21º Congreso ciertas tesis-decisiones ya elaboradas, con el fin de enfocar la atención de todas las fuerzas del Partido durante la discusión previa al Congreso.

¿CÓMO DETERMINAMOS A LOS ALIADOS POTENCIALES DE LA CLASE OBRERA?

44. La alianza social incluye a los trabajadores por cuenta propia principalmente de ciudades y pueblos que se caracterizan por la propiedad privada de medios de producción y posiblemente por un capital comercial o de otra índole limitado, por una extracción limitada de plusvalía.

La atención del Partido se centra en los trabajadores autónomos sin personal, a sabiendas de que posiblemente empleen a familiares u otra mano de obra no registrada, ante todo por temporadas. La concepción teórica y la actividad política del Partido tienen en cuenta también la estratificación por sector, p. ej. en los sectores de los servicios científico-técnicos, donde en las oficinas de servicios legales, en las oficinas de diseño y planificación técnica, en las oficinas de contabilidad, etc. coexisten trabajadores asalariados que expiden facturas de honorarios, semiproletarios cuya actividad principal consiste en trabajar para un solo empleador, otros autónomos, pero también empleadores. La Conferencia destacó la necesidad de orientarse más hacia los nuevos sectores de autónomos de las ciudades, como los científicos, los artistas, ciertos profesionales de la salud (por ejemplo, fisioterapeutas).

En las capas medias más bajas, la situación varía de un sector a otro y de un tipo de trabajo a otro en un mismo sector, mientras que las capas medias altas están claramente vinculadas a los intereses de la propiedad capitalista. Los Órganos partidistas y las OBP deben establecer un orden de prioridades en su trabajo dentro de estas fuerzas sociales, conociendo su composición, evaluando sus diversos sectores en base a los criterios leninistas generales (es decir, su relación con los medios de producción, su papel en la organización social del trabajo, la forma de obtención y las dimensiones de la parte de la riqueza social que poseen), pero también en base a los análisis y las estimaciones actuales del Partido, tal como se han formado en las dos Reuniones partidistas.

En lo que respecta a los campesinos, priorizamos nuestra intervención a los que luchan por la sobrevivencia como productores agrarios individuales, es decir, los que para sobrevivir están pendientes de su trabajo en la producción agraria. Una parte de ellos trata de incrementar su participación en la producción total, ya sea ampliando su actividad, o bien cambiando de cultivo, o promoviendo un pequeño procesamiento de su producción, pero al mismo tiempo, junto a su reproducción, reproduce también casi la totalidad de sus deudas.

En general, la capa relativamente numerosa de campesinos autónomos se mantiene principalmente mediante el pago de ayudas directas, ya que su existencia es necesaria para los monopolios de procesamiento y comercialización. Esta capa sufre las consecuencias de la economía explotadora capitalista, es aplastada por los monopolios, sus alianzas y su Εstado, tiene un interés objetivo en luchar contra ellos y sobre esta base tiene intereses comunes con la clase obrera. Estos campesinos producen todavía la mayor parte de la producción agrícola principalmente, y esta es la razón por la cual la clase obrera está interesada en su alianza.

Las organizaciones partidistas deberán insistir en el conjunto de criterios que hemos establecido, tomando en cuenta también la dimensión económica de la explotación, el grado de extensión del trabajo asalariado –ante todo del permanente-, el monto de los subsidios percibidos.

La experiencia reafirma que el acercamiento partidista y la organización sindical de los campesinos muy pequeños, que mantienen una explotación agraria para obtener un ingreso adicional, deberán efectuarse por el lado de su relación laboral principal y no como campesinos. Esto es también válido en lo que se refiere a los asalariados de la tierra, tanto permanentes como temporales, principalmente inmigrantes, o a las trabajadoras en el procedimiento de primera selección-empaque, a las que se acercan ciertas asociaciones/grupos de mujeres.

SOBRE NUESTRA INTERVENCIÓN EN LOS MOVIMIENTOS DE LOS AUTÓNOMOS DE LA CIUDAD Y DE LOS CAMPESINOS POBRES POR SU RADICALIZACIÓN Y LA COORDINACIÓN DE LA LUCHA A NIVEL NACIONAL

45. En primer lugar, los Órganos no deberían considerar el muy limitado número existente de militantes autónomos y sobre todo campesinos como elemento disuasorio de la intervención. Se ha demostrado que hay autónomos de la ciudad y campesinos en el entorno de las OBP, a los que nos dirigimos con nuestro trabajo político general, pero no estamos orientados a popularizar adecuadamente y completamente nuestras posiciones sobre ellos, así como dirigirlos para protagonizar en la fundación de organizaciones sindicales o actuar como vanguardia en las existentes, etc.

Se confirma que para ampliar los pasos en el trabajo con los aliados de la clase obrera es necesaria la intervención especializada del Partido de forma independiente y también en su movimiento, con un enfoque constante en el desarrollo de la lucha en torno a sus problemas básicos, p.ej. entre los autónomos los impuestos/las deudas, el Sistema de Seguridad Social, etc., entre los campesinos pobres teniendo como ejes básicos el coste de producción, la renta/los precios, la protección de la producción, etc.

Se ha demostrado que con reivindicaciones bien elaboradas podemos intervenir con impacto entre autónomos y campesinos pobres de otras tendencias políticas. Sigue pendiente conquistar cómo aprender a dirigirnos a partir del contexto de la lucha, el acuerdo sobre los temas planteados en el movimiento, las reivindicaciones, para conquistar una forma de trabajo que incluya fuerzas que parten de distintos puntos, que sin embargo están de acuerdo en ciertos asuntos básicos y están dispuestos a luchar.

Se trata de una base que usamos para intervenir con perspectiva, con el marco general de nuestra lucha ideológico-política. Se precisa preparación para ampliar el debate sobre las causas de los problemas, para que se relacionen con el sistema socio-económico y consecuentemente político, el capitalismo en su conjunto, a fin de responder a la lógica de la "unidad nacional y desarrollo productivo" de cada gobierno, para destacar la necesidad de estabilidad en la dirección del contenido y las formas de lucha, etc.

La clave es el involucramiento de los órganos y el funcionamiento de los respectivos Grupos Partidarios que deben enfocarse en el mejor estudio del área de responsabilidad, en el seguimiento de los desarrollos y del debate, en la elaboración y especialización de marcos de lucha, posiciones, la generalización de la experiencia de la acción.

Los Órganos  deben saber cómo está formado el movimiento en términos de estructura, correlación de fuerzas, masividad, relación con organizaciones de capitalistas, estructuras estatales, etc. Solo entonces podremos evaluar a qué organización sindical estamos dirigiendo nuestras fuerzas -militantes, simpatizantes, etc.- y de qué forma, en relación a la intervención de capitalistas, facciones de partidos burgueses, cámaras, institutos de organizaciones sindicales de tercer grado, organizaciones cooperativas, organizaciones de administración local y regional, etc.

Las Resoluciones de las dos Conferencias del Partido se detallan los criterios y se aclara que lo principal es penetrar en fuerzas populares políticamente desorientadas y manipuladas y no concentrar solo un número limitado de militantes y simpatizantes del partido en organizaciones sindicales a través de procedimientos "fáciles", "convenientes".

Una condición inviolable para las fuerzas del Partido, ya sea que su trabajo sea orientado en la clase obrera o los autónomos, debe ser el conocimiento profundo de la estrategia de la burguesía y la UE, de la dirección general de su política para pequeñas y medianas empresas al apoyo de empresas en ciertas ramas y en el desarrollo de las alianzas de la burguesía. Las subvenciones de la UE a los campesinos, aunque no tienen el mismo efecto que en el pasado, siguen siendo una fuente de ilusión y desorientación, especialmente para los propietarios directos de tierra y los productores, cuyo apoyo prácticamente prolonga su supervivencia para asegurar materia prima barata y cultivo dependiente en beneficio de los industriales y los comerciantes.

Al mismo tiempo, es necesario brindar un adecuado apoyo de dirección a los Grupos Partidarios de las asociaciones de autónomos y las Asociaciones Agrícolas, con el fin de fortalecer la atracción de jóvenes y mujeres en los respectivos movimientos.

La cuestión de la línea de agrupación militante y de masas de carácter anticapitalista-antimonopolista o incluso la difusión de ideas radicales en espacios más difíciles requiere un plan de relativamente largo plazo con especialización, jerarquización de los pasos. El nivel de intervención de los comunistas, en combinación por supuesto con las respectivas medidas para mejorar la canalización y el rango de impacto de nuestras posiciones en estas capas, es un proceso complejo con aciertos y retrocesos.

Ninguna forma de agrupación, ninguna forma de movimiento puede tener un carácter perpetuo e inmutable. En ocasiones, una forma de agrupación puede adoptar características antimonopolistas, a veces más superficiales, a veces con reivindicaciones más avanzadas. La selección de las respectivas formas de agrupaciones a nivel panhelénico, según la correlación general principalmente en los sindicatos de tercer grado, se hace con el objetivo de reunir miembros de sindicatos, aumentar la masividad de asociaciones, comités de lucha, federaciones  en una dirección antimonopolista, que en su esencia es anticapitalista, con el fin de coordinar su acción. El objetivo es que se vuelvan más masivas, más combativas, ampliar su acción, fortaleciendo la alianza con todos los oprimidos, los obreros, los campesinos, los autónomos de las ciudades, las mujeres y los jóvenes de las familias populares.

Todo eso no se hace desde el principio ni de una vez y para siempre. Es el resultado de una constante lucha, acción, comunicación ante todo de los comunistas con estas fuerzas sociales, con sus organizaciones sindicales, especialmente las de primer grado, con el esfuerzo de mantener a  las formas de agrupación vivas, representativas. En cuanto a la acción conjunta de agrupaciones de diferentes movimientos, como por ejemplo, entre fuerzas del PAME, del Comité Panhelénico de Bloques (PEM) entre los campesinos, la federación de Sindicatos Artesanales de Ática (OBSA) entre los autónomos, la Federación de Mujeres de Grecia (OGE), el Frente de Lucha de los Estudiantes (MAS) en el movimiento estudiantil, los Comités Coordinadores de Estudiantes escolares, las vanguardias comunistas deben moverse con flexibilidad, contribuyendo a la maduración de la necesidad de tal acción conjunta, sin violar el funcionamiento-decisión de los órganos  y agrupaciones individuales.

Por supuesto, las vanguardias comunistas están luchando para que se tome conciencia de los intereses comunes de entrar en conflicto con los monopolios, los gobiernos, el Estado, la UE, para revelar las consecuencias de la participación a la OTAN y los planes imperialistas en la región sabiendo que no es un proceso fácil, ni igual para todos, se desarrolla por pasos, pero también retrocesos bajo la proliferación de dilemas intimidantes, bajo el ataque de los partidos burgueses, etc.

En el movimiento de los autónomos en las ciudades, un tema crítico en el que debe centrar la preocupación del Partido -teniendo en cuenta el rumbo y desarrollo de PASEVE, el deterioro de la correlación de fuerzas  en los últimos años- es la necesidad de mejorarse "desde abajo" con el fin de crear de nuevo condiciones de coordinación panhelénica en una dirección antimonopolista radical. Este proceso presupone el fortalecimiento de las fuerzas del Partido, la adquisición de cargos, mayorías en sindicatos y sus federaciones, un objetivo hoy muy remoto en la gran mayoría de las ciudades.

Según la Resolución de la Conferencia Panhelénica, nuestra atención debe enfocar en la mejora del funcionamiento y el aumento de la masividad de los sindicatos y federaciones en cuyas administraciones tenemos la mayoría, la apertura de nuevas vías de contacto y agrupación de nuevas fuerzas, sindicatos y federaciones, el fortalecimiento de contactos con autónomos sindicalizados, otros sindicalistas que se diferencian de la línea de la Confederación General de Profesionales, Artesanos y Comerciantes (GSEVEE) y de la Confederación Nacional  de Comercio y Empresas (ESEE), el fortalecimiento de vínculos con federaciones secundarias en cuyas administraciones son mayoritarias fuerzas bajo la influencia de fuerzas capitalistas pero están de acuerdo con una cierta orientación de la lucha. Hay que tomar iniciativas que intensifiquen las acciones militantes y contribuyan a la agrupación de nuevas fuerzas.

En esta dirección nos orientamos a proponer nuevas formas de coordinación. A nivel de federación de Sindicatos Artesanales de Ática (OBSA). La lucha se radicalizará a la medida de que la estabilización y expansión de nuestras fuerzas en las grandes ciudades y los sectores de masas combinen la iniciativa inmediata de reivindicar sobre ciertos problemas con la revelación fundamentada de las causas de los problemas, es decir de la lucha ideológica y política en el movimiento.

Respectivamente, entre los campesinos pobres buscamos la organización de los campesinos que tienen un motivo de supervivencia como productores agrícolas, por pueblo o por grupo de pueblos, en forma de Asociación Agrícola. Un primer paso puede ser el Comité de Lucha, especialmente en la fase de movilizaciones. El objetivo es establecer Federaciones de Asociaciones Agrícolas a nivel de prefectura o regiones vecinas. Lograr sustraer a los sectores populares del campesinado de la influencia de los más poderosos no se aborda de manera esquemática con la creación de una Asociación Agrícola que agrupe en sus filas principalmente a militantes y simpatizantes y un número muy limitado de campesinos pobres. Por supuesto que la cuestión de su abordaje es exigente, requiere planificación, flexibilidad, escalamiento de la intervención ideológico-política constante y de masas, de la acción de vanguardia de los comunistas con un marco adecuado de lucha, consignas, formas de lucha propuestas.

Con nuestras fuerzas apoyamos al Comité Panhelénico de Bloqueos (PEM) y su marco de lucha, el esfuerzo que la coordinación panhelénica se exprese en formas de organización más estables y formas alternas de lucha, en el sentido del reagrupamiento del movimiento campesino, de la ampliación continua de la agrupación de fuerzas en una dirección antimonopolista contra la PAC. Luchamos por la promoción de la acción conjunta con la clase obrera, los autónomos de las ciudades, como resultado del entendimiento de parte de los propios órganos sindicales y las personas sindicalizadas de que esto fortalece su lucha.

Los comunistas tienen la experiencia de no ver estáticamente ninguna forma de movilización sindical panhelénica. Lo principal es entender (basado en la experiencia positiva y negativa) en qué forma deben trabajar los comunistas y contribuir a la organización de la lucha.

POR LA PROMOCIÓN DE LA ACCIÓN CONJUNTA DE LA CLASE OBRERA CON SUS POSIBLES ALIADOS EN LA PERSPECTIVA DE UNA ALIANZA SOCIAL FUERTE

46. La promoción de la alianza de la clase obrera con los autónomos y los campesinos, según se definió, es ante todo tarea de los comunistas. Bajo su propia responsabilidad, el movimiento sindical de clase logrará luchas comunes con formas de organización de fuerzas sociales cuya mismísima posición social los empuja a mayores oscilaciones y vacilaciones.

El concepto de que la alianza social se desarrollará desde el principio en base a la aceptación de las reivindicaciones de la clase obrera por parte de las capas populares de las capas medias como una muestra de solidaridad o porque, al fin y a cabo los intereses generales de la clase obrera -propiedad social de los medios de producción- constituyen el progreso social también para estas fuerzas, que sobre esta base la posición de liderazgo de la clase obrera en la alianza es dada, no es correcto. La posición objetiva de la clase obrera -que se mencionó anteriormente- en el progreso social revolucionario, en la práctica social debe ser conquistada, bajo la responsabilidad de su vanguardia ideológico-política organizada.

Su conquista presupone una comprensión de la base objetiva de las oscilaciones de las capas populares de los sectores medios, paciencia en el esfuerzo de ganar, sustraer de la influencia de las capas medias superiores y de la clase capitalista, requiere percepción y postura de vanguardia para la defensa de sus ingresos y otras necesidades sociales en condiciones capitalistas. El hecho de que objetivamente estas capas están sufriendo la tendencia de centralización en la producción agrícola, la transformación de bienes, así como en el comercio, la restauración, el turismo, etc., no justifica enfoques simplistas sobre cómo se configura su conciencia y actitud. No es evidente ni automático darse cuenta del interés común con la clase obrera, ni sin vacilación. Tales percepciones y prácticas distorsionan el carácter esencial y único de la clase obrera, del cual deriva su papel principal en el derrocamiento del poder capitalista y en la construcción del nuevo poder socialista-comunista.

La forma en que los órganos del movimiento obrero-sindical, bajo la responsabilidad de los comunistas en primer lugar, se dirigen a las organizaciones de los autónomos, los campesinos pobres, es un elemento esencial que hay que conquistar. Tener en cuenta que se dirigen a movimientos de pequeños propietarios, es decir, desde su posición de propietarios de medios de producción, tierra, capital en forma de mercancía o dinero, no pueden ser una fuerza social revolucionaria coherente. Por lo tanto, es imposible identificar y corresponder plenamente a los objetivos y reivindicaciones de la clase obrera, ni mucho menos en condiciones de retroceso general del movimiento. Por eso es necesario elaborar una línea y un marco de lucha especializados y confrontar el traspaso mecanicista de posiciones, formas de lucha y experiencias adquiridas en el movimiento obrero.

Esta tarea no es fácil en las condiciones actuales en las que la correlación de fuerzas sigue extremadamente negativa, sin embargo no significa que no existan potenciales que se desarrollen en el terreno mismo del desarrollo objetivo de la economía capitalista. Esto se evidencia en algunos esfuerzos positivos de acción conjunta, donde con tiempo formamos un marco apropiado que facilitara la acción conjunta, ante todo los mítines conjuntos en Atenas entre el Comité Panhelénico de Bloqueos y el PAME, luego entre organizaciones obreras, de artesanos y de mujeres por el feriado del Domingo, cuestiones de Salud. En la experiencia positiva se incluye el cierre de tiendas en áreas rurales en tiempos en los que habían bloqueos de campesinos en carreteras nacionales, acción conjunta por grandes problemas populares, p. ej.  la gestión de residuos (Menidi), desastres por los incendios (Ática oriental), inundaciones (Mandra) y el huracán "Ianos" (Karditsa), las cisternas de las petroleras (Perama), etc.

En algunos de estos casos de acción conjunta por grandes temas populares, se han sumado otras formas de organizaciones de masas (por ejemplo, padres, estudiantes, asociaciones vecinales culturales,  medioambientales, científicos, de artistas, etc.), además de los sindicatos de los aliados sociales, tomaron la forma de reuniones populares más amplias. En algunos casos, se movieron más rápido hacia otro objetivo de lucha, lograron en una u otra medida una comunicación-cooperación más estable entre organizaciones de masas. Y en el período de agudización de la crisis económica anterior, principalmente en los años 2011-2014, hubo formas de agrupaciones populares militantes -comités populares- que desarrollaron acciones por problemas agudos, p. ej. el corte del suministro de electricidad, la confiscación de viviendas populares, etc. Y en un futuro inmediato surgirá la necesidad de la defensa popular masiva de la vivienda popular y de pequeños profesionales frente a las subastas, de solidaridad por la supervivencia, etc. Todas ellas son formas legítimas y útiles de organización y lucha de las fuerzas populares, que no deben ser consideradas como formas permanentes de los movimientos sociales y su alianza, ni debe subestimarse su utilización y contribución a la movilización y participación de nuevas fuerzas en los movimientos.

Depende de la intervención de los comunistas en el movimiento sindical obrero para que éste, a través de procesos colectivos esenciales  (dirigiéndose a Consejos Directivos, reuniones conjuntas, etc.), se centre en temas de supervivencia y de condiciones de vida (Salud, Seguridad Social, Educación, Bienestar Social, Infraestructura Social, necesidades nutricionales y servicios de protección frente a fenómenos naturales) que conciernen de manera más amplia a las familias obreras-populares, a la mayoría de los trabajadores autónomos y los campesinos pobres, apoyar sus reivindicaciones de protección frente a las subastas, las ejecuciones hipotecarias,  etc., oponerse a las guerras, intervenciones y presiones imperialistas. Esta es la vía de conquistar la acción conjunta, de que se dé cuenta de su necesidad, de su beneficio.

Los problemas sociales importantes son la base para el desarrollo más estable de la lucha común de parte de sindicatos obreros, asociaciones agrícolas, organizaciones de trabajadores autónomos, así como asociaciones y grupos de mujeres de la OGE, organizaciones de científicos autónomos, artistas, para agrupar estudiantes universitarios y escolares, promover la alianza social en la práctica.

El desarrollo de la acción conjunta de las asociaciones y de los grupos de mujeres de la OGE con los sindicatos, las Federaciones, los Centros Laborales que ya están agrupados al PAME, así como con sindicatos, con sindicalistas con quienes buscamos desarrollar canales de comunicación, puede ayudar a que las posiciones, las reivindicaciones por los obreros y empleados se difundan en las posiciones y en el funcionamiento de las organizaciones obreras sindicales, para el aumento de la participación de las mujeres en estas organizaciones. Lo mismo ocurre en la relación de las asociaciones y grupos de la OGE con las asociaciones campesinas, órganos del movimiento estudiantil y escolar, con los órganos de autónomos de las ciudades para la difusión de posiciones y reivindicaciones acerca de la igualdad y emancipación de la mujer.

En todo caso, la promoción de la alianza social presupone la ampliación de las fuerzas que se agrupen en el PAME, así como la mejora de las posiciones de los comunistas en el movimiento campesino y especialmente en el movimiento de los autónomos de las ciudades, con el fin de que se formen y operen asociaciones y federaciones campesinas, asociaciones-uniones-federaciones de autónomos de ciudades, para liberarse de la influencia capitalista. Planificar el trabajo especial que se debe realizar en las organizaciones de los autónomos y los campesinos pobres, para que esta participación madure, reagrupar fuerzas existentes y no solo para asegurar una resolución formal.

LA RESPONSABILIDAD DE DIRECCIÓN

47. Todo lo anterior presupone la implementación planificada por separado y con las medidas correspondientes (cargos en los Órganos, formación de Grupos Partidarios, discusiones en las OBP) de la intervención ideológico-política a los campesinos y autónomos de las ciudades, su apoyo central, con material de propaganda, artículos, informes internos de posiciones, crítica a otras fuerzas, intervenciones en el Parlamento, en los Consejos Municipales y Regionales, etc.

Hay que prestar atención a la dirección para formar nuevos sindicalistas, para forjar características comunistas a través de su participación en todas las formas de luchas de clases, trabajo por el desarrollo de su conciencia comunista a través de escuelas de formación partidaria, seminarios, etc. Hace falta un calendario de acciones de información, reuniones y eventos especializados del Partido; un programa de reclutamiento, priorizando las ramas, los pueblos, el cultivo que tiene cierto potencial, donde debemos adquirir fuerzas, para formar un Grupo Partidario que tomará la iniciativa en hacer contactos en asociaciones o establecerlos.

Se requiere un trabajo especial entre los campesinos que están en la vanguardia, aquellos que pueden comprender que el futuro de la producción agrícola, en general de la producción, no reside ni en el productor individual de mercancías ni en el agricultor capitalista, sino en la gran producción agrícola mecanizada con propiedad social y planificación central, que la cooperativa productiva agrícola es un escalón en la preparación de un grupo de pequeños agricultores. Se requiere un trabajo especial correspondiente para los autónomos de la ciudad, especialmente para los científicos autónomos, así como para los artesanos en nuevas ramas dinámicas.

Se precisan cuadros en todos los niveles, desde el Comité Central hasta los Burós de la Organizaciones de Base del Partido, capaces de orientar a los Órganos y las OBP, dirigir a los concejales a los consejos directivos de organizaciones de agricultores de masas y de autónomos de las ciudades.

CAPITULO E

SOBRE LA ACCION DE LAS COMUNISTAS EN EL MOVIMIENTO RADICAL DE MUJERES (OGE)

48. Las mujeres comunistas en el movimiento de masas participan activamente en las asociaciones de mujeres de la OGE, que es una organización radical de mujeres a nivel nacional con una historia de 44 años. Es la organización de mujeres que desde su fundación se ha opuesto al enfoque aclasista de las desigualdades en detrimento de las mujeres, la orientación unilateral de los problemas que enfrentan las mujeres en términos de legislación y comportamiento por parte de los hombres. Por supuesto, la acción de las mujeres comunistas dentro de esta organización de masas no puede considerar que la agrupación de mujeres se base en una percepción política unificada o en el grado de conciencia del problema de la desigualdad de las mujeres. El elemento unificador es -al menos en la intervención central de la OGE- la visión clasista de los problemas de desigualdad de las mujeres, de los agudos problemas populares en general, la reivindicación combativa por sus necesidades contemporáneas, la participación en las luchas obreras-populares.

La orientación de algunos órganos de dirección de aumentar la participación de mujeres miembros del partido en sectores de la industria y de miembros de la KNE, así como de formar nuevos grupos de la OGE en algunas regiones, se expresó en cierta medida en el crecimiento de la participación de la las mujeres en sus asociaciones y grupos, en relación con en el congreso anterior de la OGE. Sin embargo, no se han aprovechado todas las oportunidades para llegar a las mujeres trabajadoras, a las madres, a las mujeres más jóvenes, a muchas estudiantes, que no se asocian políticamente al Partido. Es necesario abordar la dificultad manifestada que tengan los órganos de dirección un conocimiento objetivo de la situación de las Asociaciones, los Grupos de OGE y sus consejos directivos, a través del funcionamiento esencial de los Grupos Partidarios de las asociaciones de mujeres y el control creativo de la contribución de las comunistas en el movimiento radical de mujeres. Bajo su responsabilidad, es necesario comprender el papel de este movimiento que luego de la fase de la pandemia debe entrar en una nueva fase de desarrollo, superando los problemas que haya traído la pandemia. Los miembros del Partido y de la KNE deben tomar la iniciativa para que las asambleas de las Asociaciones y los Grupos de la OGE sean masivas y que desarrollen un debate y acción más esencial de cara al congreso (que fue aplazado).

Las comunistas que participan a nivel nacional en otros órganos del movimiento de mujeres trabajan para asegurar una buena orientación en la acción del consejo directivo, para la participación de trabajadoras, empleadas, mujeres trabajadoras autónomas en la ciudad y campesinas en las Asociaciones y los Grupos de la OGE. Aunque existen heterogeneidades de una región a otra, durante todo el período anterior se ha desarrollado una actividad combativa multifacética firme por las Asociaciones y Grupos en el comercio, la Salud y otros sectores, que se centró en demandas por el trabajo de las mujeres como derecho social universal, la responsabilidad social de protección de la maternidad y el apoyo de la familia, por la participación igual de las mujeres en la vida y acción sociales.

Las diversas elaboraciones centrales y la acción del movimiento radical de mujeres por la información y reivindicación combativa en base al tríptico de la estabilidad laboral, la renta de trabajo y los servicios sociales del que depende la calidad de vida y el tiempo libre, con demandas de trabajo permanente y estable, horarios fijos, abolición de las condiciones laborales flexibles, en defensa del descanso dominical, con reivindicaciones contra el Estado burgués, las instituciones burguesas, y la patronal capitalista son un gran aporte a la especialización del trabajo de los comunistas en las mujeres. La agitación de estas demandas forma criterios, revela las causas económicas y sociales que son responsables de la insatisfacción de las necesidades sociales contemporáneas de las mujeres, teniendo en cuenta sus necesidades especiales por su papel en el proceso reproductivo, destacando las posibilidades actuales en el siglo XXI. Esto destaca su singularidad como movimiento radical de mujeres, que no solo no entra en conflicto con el movimiento obrero-sindical y otros movimientos sociales radicales (de los trabajadores autónomos en las ciudades, los campesinos), sino que también coopera con ellos en el esfuerzo de aumentar la participación de las mujeres trabajadoras en las luchas obreras-populares.

Un frente importante del trabajo ideológico-político en las mujeres, que requiere una mayor especialización, es la revelación y condena de las intervenciones imperialistas, de la OTAN, las bases extranjeras en Grecia, los acuerdos relativamente recientes entre EE.UU. y Grecia, la acción conjunta con el EEDYE (Comité Griego por la Distensión Internacional y la Paz), en el frente contra el uso de drogas a menudo en acción común con las organizaciones respectivas, la solidaridad con los refugiados y especialmente con las mujeres y los niños.

Los órganos de dirección y los Grupos Partidarios en las Asociaciones y los Grupos de la OGE deben reflexionar sobre las conclusiones de sus campañas en los últimos años. Han ayudado abrir la discusión más ampliamente con mujeres en centros de trabajo, universidades, barrios, sobre el marco de lucha que destaca los problemas de las mujeres en todos los aspectos de su vida social relacionados con la fusión de la desigualdad de las mujeres y la segregación clasista de la sociedad, la explotación capitalista.

Los órganos de dirección deben mostrar determinación en la agrupación de las estudiantes en el movimiento radical, para su acción combativa conjunta con las asociaciones de estudiantes, algo que se puede hacer mediante la sensibilización de los miembros y amigos de la KNE en las universidades.

Las mujeres dirigentes y militantes del partido, independientemente de su cargo, pero también los Grupos Partidarios en sindicatos en sectores con gran participación de mujeres (p.ej. Comercio, Servicios, Telecomunicaciones, Turismo, Salud, Educación), pueden utilizar más esencialmente el Boletín de la OGE. Es una publicación que puede aclarar ampliamente a las mujeres de la clase obrera asuntos que tienen que ver con las necesidades sociales contemporáneas de las mujeres, como la salud y especialmente las necesidades del Sistema Primario de Salud, la amistad de los pueblos frente a las invasiones imperialistas, la solidaridad con los refugiados, promoviendo reivindicaciones e iniciativas combativas. Especialmente en los últimos años se ha mejorado en su contenido y forma, se ha enriquecido con artículos de sindicalistas de los centros de trabajo.

Es necesario que los órganos de dirección se comprometan a orientar las comunistas en los consejos directivos de las asociaciones de mujeres para el desarrollo de acciones conjuntas con los sindicatos, las asociaciones de los trabajadores autónomos y las asociaciones de campesinos, para que su intervención adquiera un contenido sustancial. Se hizo un esfuerzo en esta dirección con respecto al Día Internacional de la Mujer en 2020, que trajo algunos buenos resultados en Ática y resultados más limitados en Salónica, Tesalia, Creta. En parte, contribuyó a la difusión de posiciones y demandas de las empleadas para la vida y el funcionamiento de los sindicatos. Es necesario aprovechar a nivel nacional la experiencia de la acción conjunta que se ha ido acumulando en Ática, donde se están dando pasos más estables en esta dirección, principalmente en el comercio y con el desarrollo de la acción conjunta para el descanso dominical por parte del Sindicato de empleados en el sector privado, la Federación de Asociaciones de Artesanos en Ática (OBSA) y la OGE.

Particularmente durante el período de medidas restrictivas, resultó necesario el apoyo persistente de los dirigentes en la intervención de las militantes comunistas en los consejos directivos y las asociaciones de mujeres en cuanto a las dificultades en su funcionamiento con el fin de desarrollar una acción multiforme, tomar iniciativas sobre todos los problemas populares tal como se expresó en las jornadas de acción panhelénica en la Salud, el Comercio, la Alimentación - Turismo, etc.

Sobre la lucha en la Federación Democrática Internacional de Mujeres (FDIM)

49. La correlación de fuerzas actual refleja la participación de un gran número de organizaciones en una dirección socialdemócrata, y la situación negativa del movimiento comunista, mientras que en muchos países los partidos comunistas no han desarrollado una línea de trabajo de las comunistas en dirección de crear y poner en marcha organizaciones radicales de mujeres. Al mismo tiempo, muchas organizaciones de la FDIM, en algunos casos incluso las afiliadas a partidos comunistas, mantienen posiciones que reproducen conceptos erróneos y una política de integración del movimiento de mujeres.

Un nuevo elemento del último período es que cada vez más organizaciones de mujeres de la FDIM adoptan puntos de vista burgueses y oportunistas de la corriente feminista en el movimiento de mujeres, así como los puntos de vista sobre el "género social". A través de la intervención de la OGE, se destacó la necesidad de fortalecer la orientación radical en el movimiento de mujeres, con organizaciones de mujeres masivas basadas en asociaciones de mujeres y sus miembros. De apoyar con su acción militante los intereses, las demandas de las mujeres de posición u origen popular-obrero. Consideramos que en el contexto de la FDIM, las fuerzas de la OGE se han opuesto a la orientación de varias organizaciones de mujeres que apoyan principalmente a los gobiernos socialdemócratas burgueses, frente al modelo liberal de gestión burguesa así como a las uniones imperialistas. Desde este punto de vista, se insistió en la necesidad de condenar los planes imperialistas de Estados Unidos-OTAN-UE, en la postura de las organizaciones de mujeres con respecto a las intervenciones imperialistas para rechazar las negociaciones de las clases burguesas y el atrapamiento en los diversos centros imperialistas. Las fuerzas de la OGE, en estas difíciles circunstancias, buscaron una acción conjunta con otras organizaciones.

CAPITULO F

EL TRABAJO DEL KKE EN LOS JÓVENES DE FAMILIAS OBRERAS-POPULARES

50. La intervención del Partido y de la KNE en los hombres y mujeres jóvenes de familias obreras-populares puede proporcionar una salida sustancial a las preocupaciones relativas a su presente y futuro. Esta intervención ideológica y política, a través de la acción y elaboración de contenido y formas de lucha en el movimiento de masas, puede ser decisiva, para que los problemas encontrados en los esfuerzos por la educación, el trabajo, el uso creativo del tiempo libre, el desarrollo de la actividad social, las relaciones personales, la formación de una familia, se conviertan en un terreno de reivindicación, acción colectiva organizada, para que los jóvenes tengan derechos, para reclamar sus necesidades modernas.

Respecto a los trabajadores jóvenes, como parte de la clase obrera del país, que tienen particular importancia para el rumbo del movimiento obrero, se hizo una referencia detallada en los capítulos anteriores. El Partido está igualmente interesado y preocupado por los hombres y mujeres jóvenes que hoy están en todos los niveles de la educación, que mañana engrosarán principalmente las filas de los trabajadores  asalariados, pero también de los trabajadores autónomos, las filas de las  capas aliadas con la clase obrera.

Desde el XX Congreso, se han desarrollado luchas que alentaron iniciativas de fuerzas del Partido y la KNE, no solo de forma independiente sino también en organizaciones de masas, por supuesto con diferencias en el nivel de movimiento de masas (luchas estudiantiles, levantamientos de estudiantes universitarios, movilizaciones sobre todo de docentes no permanentes, participación de los padres en manifestaciones para la Educación, etc.). En nuestra percepción sobre la intervención de los comunistas en el movimiento surgen algunos rasgos positivos más permanentes, especialmente en las áreas de Educación, que se deben mantener y expandir como forma de pensar y actuar.

Se puede llegar a la conclusión de que el trabajo en base a las especializaciones de nuestro programa en cada centro de trabajo y nivel de educación contribuye de manera decisiva a la capacidad de elaborar los objetivos de lucha en la acción viva del movimiento. Nos permite bordar la política gubernamental actual en el campo de la Educación desde un punto de vista de clase y de manera argumentada. Además, ayuda a abordar una serie de nuevas cuestiones o problemas que surgen en la Educación, aunque expresan los problemas del desarrollo de la sociedad burguesa (por ejemplo, pobreza lingüística, bullying, impacto en la conciencia de los jóvenes por la utilización capitalista del Internet, etc.).

Las conclusiones anteriores también se confirmaron en relación con las luchas estudiantiles, donde el tema de la formación ideológica de los nuevos comunistas se convirtió en un elemento necesario, pero también en un factor que contribuyó -en la medida en que se desarrolló- a la resistencia y perspectiva del movimiento.

Se han dado pasos para entender, en primer lugar en los órganos dirigentes, que el problema educativo debe ser tratado como un problema sociopolítico, tanto en términos de posición teórica general, pero también en términos de formulación y elaboración de objetivos de lucha que unan a los movimientos y organizaciones individuales en el frente de la Educación.

LA ACCIÓN EN LAS ESCUELAS SECUNDARIAS, DE FORMACIÓN PROFESIONAL Y EN CENTROS DE FORMACIÓN Y APRENDIZAJE

51. En las escuelas secundarias (inferior, superior y de vocación-EPAL) objetivamente, debido a la gran concentración de jóvenes, la KNE tiene una responsabilidad particular en especializar nuestra intervención, recopilar y estudiar la experiencia resultante.

En los años que han transcurrido se han dado pasos en la coordinación de las Organizaciones de la KNE con las respectivas Organizaciones del Partido para la revitalización del movimiento escolar estudiantil. Por supuesto, la situación en los consejos de estudiantes secundarios, es decir en el "corazón" del movimiento escolar estudiantil, sigue siendo débil y de hecho se ha intensificado el esfuerzo del gobierno, del aparato estatal y de otros partidos políticos, de intervenir en su contenido y funcionamiento.

La KNE, a través de sus miembros y amigos electos, ha jugado un papel principal en los consejos escolares estudiantiles, para que funcionen como instrumentos de lucha por los agudos problemas y necesidades de los estudiantes durante todos estos años, e influye, en mayor o menor grado, en todas las escuelas del país.

Los cambios continuos en las escuelas y especialmente en el sistema de exámenes, son un factor clave en el desarrollo de las luchas de los estudiantes. El conocimiento cada vez más osificado que proporciona la escuela, la vida cotidiana monótona y agobiante que genera estrés a los estudiantes, es el terreno sobre el que trabajaron la KNE y el Partido, utilizando la elaboración de nuestra tesis sobre la "Escuela de Educación General Unificada de Doce Años", más específicamente el folleto para estudiantes elaborado por el Comité de Estudiantes del Consejo Central que fue actualizado. Nuestra propia intervención ha dado lugar a la discusión y reflexión sobre la oposición a las intervenciones militares, la expresión de solidaridad con sus víctimas, los refugiados y, en general, la toma de acciones contra el fascismo, el racismo y la marginación de personas debido al género, la religión, la orientación sexual, acciones sobre cuestiones ambientales, el uso de espacios libres, etc. En todo lo anterior, nuestras fuerzas se enfrentan a la intervención multifacética del oponente que se despliega por muchos canales y con nuevas formas adaptadas a estos grupos de edad.

Sigue siendo urgente tomar medidas más decisivas para intensificar la lucha contra la ideología dominante, que se expresa tanto en los libros escolares como en varios programas escolares, por una amplia gama de patrocinadores, inspiradores y su personal (ONG, embajadas etc.) que ponen en marcha varios programas.

Se ha confirmado que la acción multifacética de los miembros y amigos electos de la KNE en las escuelas y en las aulas por todo lo que concierne a la comunidad estudiantil concede características combativas a los consejos escolares estudiantiles, refuerza su funcionamiento, promueve la discusión colectiva y la organización de los estudiantes y consolida nuestras propias fuerzas.

De esta manera, se puede incidir firmemente tanto en el contenido y en el marco de las demandas que adopta el movimiento estudiantil en diversas fases, como en el establecimiento de nuevas formas de organización del movimiento estudiantil, principalmente la de los Comités Coordinadores de Escuelas en los municipios. Las fuerzas de la KNE apoyan al Comité Coordinador de los Estudiantes de Atenas, que ha sido ampliamente reconocido y su acción ha sido reconocida a nivel nacional.

Este esfuerzo debe tener un mejor apoyo por la acción coordinada de nuestras fuerzas entre padres y maestros a nivel nacional, por región o unidad escolar.

Las movilizaciones de estudiantes secundarios ante la segunda ola de la pandemia son de particular importancia para el enfrentamiento con el gobierno sobre temas de salud. Se ha adquirido experiencia importante, especialmente en aspectos que conciernen la elaboración de marcos de lucha, consignas, la escalada y alternancia de formas de movilización de las fuerzas de la KNE con argumentos que se basan a la reflexión y el pensamiento de los estudiantes, en mejor cooperación con los Grupos Partidarios, con padres y maestros. Se ha revelado un plan más general del gobierno que buscaba caracterizar las luchas estudiantiles como un "movimiento anti-mascarilla".

Sin subestimar las debilidades, se han establecido ciertas condiciones para dar un paso claro en la expansión de los vínculos de la KNE en las escuelas, con la promoción de sus miembros a los consejos de estudiantes, a comités de coordinación bien establecidos a través de su actividad. Es muy importante apoyar este trabajo en el próximo período, con una actividad multifacética, centrándose en la Organización de Base de Estudiantes, en su contenido, en la posibilidad de abrir nuevos caminos de forma masiva con los estudiantes secundarios, con la mirada en la unidad escolar.

Es importante que los propios estudiantes miembros de la KNE sigan desempeñando un papel protagonista en la creación y fortalecimiento de un espíritu militante, en el reclutamiento, involucrándose más activamente y con confianza en el enfrentamiento político, con el ajuste necesario a la experiencia social de estos grupos de edad. El trabajo de los órganos de dirección del Partido y de la KNE, que es más exigente que en años anteriores,  puede ayudar en esta dirección.

SOBRE LA EDUCACIÓN PROFESIONAL EN PARTICULAR

52. El trabajo en la Educación Profesional y el Aprendizaje es un trabajo de perspectiva en la clase obrera, en el reagrupamiento del movimiento obrero y la intervención en los trabajadores autónomos. Todavía estamos lejos de la coordinación del Partido y de la KNE por categoría de escuela, rama, especialidad y región. Las Secciones del Comité Central, los Grupos Partidarios en las Federaciones, los Centros Laborales y los sindicatos sectoriales junto con las fuerzas de la KNE deben tener un plan de seguimiento, de elaboración de temas, de intervención y finalmente de construcción de organizaciones en la Educación Profesional.

Especialmente los estudiantes de las escuelas secundarias superiores de formación profesional (EPAL), como parte del movimiento estudiantil, han tomado parte activo en las luchas estudiantiles de los últimos años sobre los problemas comunes. Debido al deterioro de sus estudios las dificultades para adquirir una especialización técnico-profesional afectan por supuesto el desarrollo de un ánimo combativo. Nuestra intervención en las EPAL puede mejorarse en estos temas en base a la actualización de nuestra posición sobre la Educación Profesional. Es un área de especial importancia, ya que el propio origen de clase de estos niños les afecta, mientras que muchas veces trabajan en paralelo con sus estudios. Necesitamos tener en cuenta el tráfico de drogas específico por círculos, las actividades de varios grupos, asociaciones de aficionados al fútbol, etc.

En los últimos años, ha habido una masificación de los procedimientos de las Asociaciones de Estudiantes de Institutos Públicos de Formación Profesional, de las asambleas en las escuelas, con la intervención decisiva de las fuerzas de la KNE, fuerzas jóvenes e inexpertas que necesitan un apoyo esencial.

 

SOBRE EL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL UNIVERSITARIO

53. El Partido y de la KNE dentro del movimiento estudiantil universitario realizaron sus esfuerzos en circunstancias especiales, lo cual se ha demostrado ser una tarea exigente. Las condiciones decisivas para dar pasos distintivos en el reagrupamiento militante del movimiento estudiantil universitario en dirección antimonopolista-anticapitalista son el desarrollo de nuestras fuerzas organizadas en las universidades, el fortalecimiento de su intervención ideológica y política polifacética vinculada con su disciplina académica, el estudio de la experiencia de nuestra intervención para el desarrollo de procesos combativos en los años anteriores.

Cualquier paso positivo que se haya tomado ha sido marcado por nuestras fuerzas, pero no es sólido. El movimiento estudiantil universitario todavía está en una crisis profunda y en retroceso. Aparte de la ausencia a largo plazo de una estructura organizada, la baja participación en los procesos del movimiento, la línea de compromiso y consenso con la política dominante, a través de la multifacética intervención del oponente, se lanzó un esfuerzo más intenso de difamar las luchas de los estudiantes universitarios con varias formas. La degeneración también se intensificó debido a que no hubo procedimientos masivos (asambleas generales, elecciones de estudiantes, etc.) durante aproximadamente un año porque las universidades estaban básicamente cerradas desde el estallido de la pandemia. Al mismo tiempo, se ha reforzado y sigue reforzándose el marco legal represivo para prevenir procesos positivos en las luchas, la radicalización de conciencias. Más esfuerzos de disolver el movimiento utilizando como arma la votación electrónica se encuentran entre las prioridades.

El fortalecimiento del Frente Militante de Estudiantes (MAS) con nuevas asociaciones en los últimos años expresa algunos elementos positivos que se han desarrollado en las asociaciones estudiantiles. Hoy, once años desde su fundación, se han dado pasos importantes en su consolidación y es reconocido ampliamente entre los estudiantes. Esto se refleja también en el hecho de que aglutina un mayor número de asociaciones de estudiantes (69 asociaciones de estudiantes, asociaciones de estudiantes de los antiguos TEI (Institutos de Educación  Tecnológica), asociaciones de internos y algunos comités de lucha, comités de curso, etc.). Este aumento se basa principalmente en una correlación más favorable en los consejos directivos de las asociaciones donde Panspoudastiki KS (la lista de la KNE en las universidades) surgió primera en votos.

Estas asociaciones han estado a la vanguardia de los esfuerzos de coordinación, acción conjunta y reivindicación, han contribuido a la dirección de la organización, de la respuesta del movimiento estudiantil universitario frente a la escalada de la política gubernamental contra los derechos de los estudiantes.

La experiencia acumulada en algunas organizaciones a partir de la elaboración de marcos de lucha, reivindicaciones, y la agitación, se puede generalizar y utilizar en la orientación. Abordar todos los aspectos de la vida de los estudiantes, las condiciones de estudio, la educación, el grado, la perspectiva profesional, temas de ciencia-investigación, de entretenimiento, de deportes, la cultura son una dirección que ayuda a movilizar a fuerzas más amplias, ayuda en muchos casos a destacar y luchar por las necesidades contemporáneas de los estudiantes. Podemos fomentar de manera más decisiva entre los miembros, principalmente de la KNE, una excelencia basada en la educación y el conocimiento marxista, en la capacidad de observar el objeto de estudio y tener un ojo crítico, que pueda distinguir en todo lo anterior, injertar ideas radicales y revolucionaras en las reflexiones y preocupaciones de los jóvenes, y tener un impacto positivo en el desarrollo del movimiento.

Por supuesto, no nos olvidamos que este elaborado trabajo está lejos de llegar a la base del movimiento, aun tiene que llegar masivamente entre los estudiantes, y esto también concierne a las asociaciones que participan en el MAS.

Es un tema de dirección que se debe conquistar y concierne la asistencia hacia los miembros del Partido y de la KNE en las universidades, para que los esfuerzos de agitación, información y debate con las demás fuerzas por la orientación de la lucha y por supuesto la acción militante en este territorio no sean fragmentados.

No se puede subestimar la discusión sobre el valor de la lucha y la organización colectiva-sindical, la necesidad de tener una asociación estudiantil, con la participación masiva de los estudiantes, que es un arma en la lucha combativa, colectiva, organizada por sus derechos. Esto se debe destacar a través de una actividad polifacética en todos los niveles (para el futuro de los egresados, actividades basadas en cada objeto científico, para temas de Cultura, Deportes, Historia, etc.), distinguiendo nuestra responsabilidad sobre todo donde nuestras fuerzas tienen la mayoría en los consejos directivos. Debemos intensificar el esfuerzo para la masificación de las asociaciones estudiantiles, para el cambio de las correlaciones donde somos minoritarios, el estudio y utilización de la infraestructura que se forma en el movimiento estudiantil, la posibilidad de crear formas de organización en cada curso y departamento, especialmente allí donde no existe reivindicación colectiva a causa, entre otras razones, de la condición  disolvente en las asociaciones, el proceso de formación de nuevas asociaciones en las universidades que anteriormente eran los TEI.

CON LA MIRADA PUESTA EN TODOS LOS ASPECTOS DE LA VIDA DE LA JUVENTUD

54. La lucha de los militantes del Partido y de la KNE, especialmente dentro de los movimientos juveniles, está íntegramente ligada con la lucha por la cultura y los deportes, generalmente, por la utilización creativa y de calidad del tiempo libre, la recreación, el derecho a las vacaciones, etc. Buscamos difundir una actividad más amplia y multifacética que estará en conflicto con las consecuencias del dominio de la comercialización y el hecho de que lo anterior para muchos jóvenes hoy es un "lujo" muy caro o un hobby para quienes tienen tiempo para hacerlo. También se opondrá al intento de utilizarlos de muchas maneras para promover los valores y estándares del capitalismo, la competencia y la ideología burguesa.

Desde este punto de vista, es necesario hacer un seguimiento de los desarrollos en su conjunto e intervenir a un nivel político central. Aún más imperativo, sin embargo, es prestar atención en cómo integrar estos frentes en las demandas del movimiento de masas, cómo trabajar dentro de las asociaciones culturales, locales, asociaciones deportivas y recintos deportivos, cómo desarrollaremos políticas y otras iniciativas como centros de cultura para los jóvenes, entre otras, actividades deportivas que reunirán fuerzas y enviarán un mensaje combativo. Las iniciativas que desarrollamos esporádicamente son muy exitosas, sin embargo no existe un plan integrado en la mayoría de las Organizaciones.

LUCHA CONTRA LAS DROGAS

55. La política de la burguesía hacia el fenómeno social de la drogadicción se mueve en la dirección de políticas de "legalización", represión, "reducción de daños", generalización de sucedáneos de la heroína, salas de uso supervisado de droga, y distinción de las drogas en "blandas y duras". Básicamente, su objetivo es gestionar el problema y no afrontarlo.

Nuestro Partido ha dado pasos para fortalecer el frente ideológico, político y social contra la difusión de las drogas y el estilo de vida que representan.

Nos centramos en:

a) el fortalecimiento de una amplia discusión en la dirección de resaltar las causas del fenómeno, en el marco del movimiento y de sus estructuras (sindicatos, organizaciones juveniles, asociaciones de padres, sindicatos deportivos y culturales).

b) el estudio de las consecuencias de la dependencia en la formación de la conciencia y en la acción en los jóvenes, pero también la manera en que se forma una percepción de tolerancia por personas que hacen uso ocasional o nulo, hecho que tiene un efecto multiplicador y afecta negativamente la familiaridad con el fenómeno.

c) la promoción integrada del marco de demandas y reivindicaciones planteadas por el KKE y la KNE en todo el espectro de prevención, tratamiento, reinserción social e investigación, que se centra en las causas del fenómeno y las necesidades contemporáneas del hombre.

d) destacar la emergencia de que solo la fuerza del poder popular tiene todas las posibilidades para eliminar la dependencia de sustancias psicoactivas y es por eso que el KKE tiene un programa elaborado de cómo el poder obrera responderá a este fenómeno social.

EPÍLOGO

56. El KKE asume grandes tareas para el reagrupamiento del movimiento obrero, para la formación de la alianza social. El Comité Central considera que junto a los desarrollos negativos, existen al mismo tiempo reservas en el movimiento, varios brotes de resistencia que deben ayudar que salgan a la superficie y que se expresen fuertemente. La responsabilidad del Partido, de todos los militantes y dirigentes es cada vez mayor.

Luchamos para la masificación del movimiento sindical organizado. Estamos en la primera línea en el conflicto con el fatalismo y el miedo, la frustración y el conservadurismo, con todas las percepciones reaccionarias que los refuerzan.

Estamos en la tercera década del siglo XXI. El arduo trabajo de los hombres y las mujeres comunistas, las personas que luchan junto a nosotros para lograr nuestros objetivos, todas nuestras iniciativas individuales, deben mostrar de manera unificada que ninguna versión de la gestión burguesa antipopular en Grecia, en Europa y en el mundo da respuesta y solución al problema principal: Hoy en día, si bien existe todo el potencial para mejorar el nivel de vida de millones de trabajadores en nuestro país y en todo el mundo, los resultados son todo lo contrario.

La brecha, entre cómo un empleado puede vivir hoy y cómo eventualmente vive, está creciendo. Ahora, en el siglo XXI, la experiencia estudiada junto con el propio desarrollo objetivo de las sociedades puede conducirnos a la nueva sociedad, si los pueblos lo señalamos como meta, si decidimos mostrar nuestra verdadera fuerza. El pueblo aún no ha probado su fuerza, por lo que no debe haber desilusión sobre la efectividad de las luchas: la preparación de fuerzas para el contraataque obrero y popular es primordial.

En la lucha por la satisfacción de las necesidades populares contemporáneas, en la lucha contra la guerra imperialista y la participación de nuestro país en las organizaciones y planes imperialistas, podemos avanzar juntos con miles de trabajadores, crear grietas en el sistema explotador actual, en el compromiso y el fatalismo, podemos construir una gran alianza social, no sólo para buscar alivio a los agudos problemas actuales, sino también para crear las condiciones previas necesarias para el derrocamiento radical, para el socialismo comunismo.

Atenas, 25 de enero de 2021

El Comité Central del KKE