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Hagan lo que hagan, la URSS siempre significará: ¡EL Socialismo que se consolidó en la lucha!

A la sombra de la reunión entre Trump y Putin, se comentó en todo el mundo la sudadera que llevaba el Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, S.Lavrov, con las siglas de la URSS, es decir CCCP (Союз Советских Социалистических Республик- Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas).
La UE, la OTAN y el bando euro-atlántico saben muy bien que la Rusia actual es lo contrario a la Unión Soviética, pero estas cuatro letras (CCCP) por si solas bastan para despertar los instintos anticomunistas, que no es tan difícil.
Se ha demostrado que el anticomunismo multifacético es parte de la propaganda bélica de los dos bandos imperialistas que se enfrentan militarmente en Ucrania (por el momento).
La burguesía rusa, especialmente en los últimos tres años con la escalada de la guerra entre Rusia y OTAN, profanan los logros, los sacrificios y la contribución del primer Estado socialista, la URSS, sobre todo su contribución a la derrota del nazi-fascismo en la Segunda Guerra Mundial, para movilizar en su interior y en el extranjero, a los pueblos bajo los objetivos de los monopolios rusos y otros.
Aprovecha la reputación y el prestigio que adquirió el primer Estado socialista tanto por los logros a favor de los pueblos de la URSS, como por el hecho de que como Estado obrero se convirtió en pesadilla de los imperialistas, luchando y venciendo desde los Urales hasta Berlín.
No es casualidad que incluso hoy, casi 35 años después de la contrarrevolución, este prestigio queda reflejado en las encuestas en Rusia en las que la mayoría abrumadora, más de 60%, las respuestas destacan que el período de la construcción socialista, de la Unión Soviética, fue el mejor período en la historia de Rusia. Resultados similares se destacan en otros países de la antigua URSS. De hecho, en encuestas más recientes, se aumenta el porcentaje de las edades jóvenes que no han vivido el socialismo pero se ponen del lado de la defensa del período soviético, como una época de “justicia”, derechos, estabilidad y prosperidad para el pueblo.
Este prestigio persigue a los que dieron su vida en la lucha por derrocar el Socialismo, los imperialistas de EE.UU.-OTAN-UE así como los que lo “traicionaron” sirviendo y trabajando por la victoria de la contrarrevolución y el derrocamiento del Socialismo.
Las siglas “CCCP” nunca serán solamente un estampado. Porque el “CCCP” siempre contendrá la “otra sociedad”, la victoria de la clase obrera, la abolición de la esclavitud salarial, el Socialismo que “se consolidó en la lucha”, la pesadilla de los explotadores en todo el mundo hasta que ellos y su poder se conviertan en cosa del pasado.
Algunos apologistas de las aspiraciones de la burguesía rusa vieron en el “simbolismo”… falsas ilusiones que serían ridículas si no fuera tan peligrosas. La Rusia capitalista actual no existiría si no se hubiera derrocado el Socialismo en la URSS. El acta de nacimiento de la Rusia capitalista actual es el acta del derrocamiento del Socialismo en la URSS.
Incluso los posteriores líderes de la Rusia capitalista, como personas físicas, tomaron parte en la contrarrevolución en la URSS. Estaban junto a Yeltsin y los ladrones del sudor de los pueblos soviéticos. Y ahora, después de haber derrocado el Estado obrero, después de haber traído de nuevo al poder a los que el proletariado había derrocado con la Gran Revolución Socialista de Octubre y con los bolcheviques en la cabeza, después de haber despreciado de la peor manera y destrozado todo lo que habían logrado los pueblos de la URSS construyendo el socialismo y luchando… ahora llevan las siglas “CCCP” como una herramienta de comunicación de las negociaciones con Trump sobre las “garantías de seguridad” en Ucrania, sobre cómo seguirán matando a los pueblos que habían prosperado construyendo juntos el Socialismo en el siglo XX, sobre quién obtendrá las tierras raras de Ucrania, y mucho más, sobre qué monopolios controlarán las rutas marítimas y terrestres de transporte de mercancías.
No hace mucho tiempo, mientras V.Putin declaraba la necesidad de desnazificación de Ucrania, afirmaba, en nombre de los monopolios de Rusia, que tenía el conocimiento para llevar a cabo la “verdadera” descomunización culpando de todo a… Lenin. Calificativos como “terrorismo rojo”, “régimen totalitario”, “dictadura estalinista”, “golpe de Estado de octubre” la Gran Revolución Socialista de Octubre etc. han sido atribuidos a la URSS no solo por los partidarios del euroatlantismo sino también por el propio Putin.
Ni tampoco es algo nuevo que en ambos bandos de la guerra entre Rusia y la OTAN operan batallones y organizaciones nazis, integrados en los planes operativos de cada bando. La burguesía rusa y su personal político no vacilan en alternar el honor a la URSS con la rehabilitación de los colaboradores de los nazis.
La invocación a la URSS de parte de los sepultureros del Socialismo en Rusia es otro aspecto de la preparación para un conflicto imperialista más generalizado. Sin embargo, esta vez en las estepas de Ucrania se derrama sangre por los intereses de los imperialistas y no en defensa de la patria socialista. Esta fue destrozada por los que hoy profanan la contribución del Socialismo a los pueblos que lo construyeron, como el pueblo de Rusia y el de Ucrania.
En el anticomunismo y el antisovietismo se unen todos los aspectos del conflicto. Tanto si hablamos del régimen de Zelenski, como si hablamos del régimen de Putin, de la UE, de Trump, de Biden antes. Porque lo que quieren evitar es que los pueblos tomen el asunto en sus manos, saliendo de la matanza imperialista victoriosos, derrocando el poder del capital. Sea cual sea el modo que utilizan los explotadores para evitar esta perspectiva, no lo lograrán.
Comentario del portal informativo del KKE https://www.902.gr/
19.08.2025